El crucero RCGS Resolute al que la Armada venezolana acusó por embestir al guardacosa “Naiguatá”, cerca de la isla La Tortuga y ocasionar su hundimiento, emitió un comunicado en el que desmintió esta versión y contó que fue el buque venezolano el que atacó.
La declaración de la compañía Columbia Cruise Services apunta que el RCGS Resolute estuvo todo el día en frente de las costas venezolanas, debido a que estaba realizando el mantenimiento al motor principal del estribor.
No obstante, durante la medianoche del 30 de marzo, un barco de la Armada venezolana abordó a los tripulantes de la nave, 32 en total, y cuestionó la presencia del crucero en aguas internacionales.
Ante esto, la Armada obligó al Resolute a partir hacia Puerto Moreno, en la Isla de Margarita. “El capitán quería volver a confirmar esta solicitud en particular, lo que resultó en una desviación grave de la ruta programada del barco con la compañía DPA”, detalló la compañía de cruceros.
Mientras el capitán del Resolute se puso en contacto con la oficina central para informar de la situación, la Armada disparó sus armas contra el barco y lo embistió repetidas veces.
“El buque de la Armada continuó golpeando la proa de estribor, en un aparente intento de girar la cabeza del barco hacia las aguas territoriales venezolanas”, explicó Columbia.
Como resultado, el barco venezolano sufrió daños irreparables que ocasionaron su hundimiento. El Resolute aseguró que luego del incidente se quedó en el sitio por más de una hora y contactó al Centro de Coordinación de Rescate Marítimo de Curazao.
“Solo después de recibir la orden de reanudar el paso por delante por el MRCC y de que no se requiere asistencia adicional, el Resolute RCGS, actualmente amarrado de forma segura en el puerto de Willemstad, continuó navegando hacia su destino en Curazao”, publicó El Nacional.
Fuente: El Carabobeño