El hábeas corpus, que protege de vulneraciones a los derechos constitucionales, entre ellos el de la libertad, anuló una resolución de 2018 de la Corte Suprema que había dejado sin efecto el indulto otorgado por Kuczynski. Tras obtener el indulto de 2017 Fujimori vivió casi un año en una casa ubicada en un barrio residencial de Lima. Volvió prisión en octubre de 2018.
El perdón fue anulado en octubre de 2018, cuando el Tribunal Supremo de Perú ordenó su captura amparándose en la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta para la cual no cabe indulto humanitario al tratarse de delitos de lesa humanidad.
A su vez, en el fallo del juez Supremo Hugo Núñez Julca también se hizo mención a las irregularidades que Kuczynski cometió al otorgar el indulto al expresidente, con su hijo Kenji Fujimori y otros congresistas de Fuerza Popular medrando en esa operación.
La decisión del tribunal Constitucional, permitirá excarcelar a Fujimori —de 83 años y quien gobernó entre 1990 y 2000— y acortar una sentencia que iba a culminar el 10 de febrero de 2032.
Por su parte, la legisladora de «Juntos por el Perú», rechazan el indulto dado por el tribunal y pidió » A estar atentos y vigilantes en las calles para que el Tribunal Constitucional sepa que no permitiremos la liberación de Alberto Fujimori. Indulto es insulto».
Fuente: Diario las Américas