La controvertida alianza entre los partidos de centro y derecha del Congreso peruano -integrada Alianza para el Progreso (APP), Fuerza Popular y Avanza País- con el partido marxista leninista Perú Libre –el que llevó a la presidencia al golpista Pedro Castillo- ganó la elección de la mesa directiva del Parlamento este miércoles tras una rápida votación.
Con 77 votos, la heteróclita alianza venció a la conformada por legisladores provenientes de bancadas de centro e izquierda -esta última había sido parte de Perú Libre, pero fue alejándose paulatinamente desde 2022-, por lo que presidirá la Mesa Directiva durante el período de sesiones 2023-2024.
A pesar de la victoria, la nueva junta directiva deberá afrontar un momento frágil para el Congreso, desprestigiado por varios actos irregulares, como el presunto recorte de sueldos que algunos parlamentarios habrían hecho a sus trabajadores de despacho, así como viajes financiados por empresas privadas y el constante enfrentamiento político que ha llevado al hartazgo a la mayoría de peruanos.
Esa realidad no es ajena para el flamante presidente del Congreso peruano, Alejandro Soto, quien realizó un pronunciamiento para anunciar la elaboración de una «agenda conjunta» con diferentes bancadas, remarcando que la nueva Mesa Directiva tiene «el compromiso de luchar por la institucionalidad».
«Buscamos revertir el bajo nivel de aceptación que se tiene en la población y para eso hemos concertado con Fuerza Popular, Perú Libre, Avanza País, Somos Perú, para que estas bancadas juntas elaboremos una agenda conjunta urgente«, agregó.
Una alianza «negada»
Perú Libre y Fuerza Popular se enfrentaron durante las elecciones generales 2021, en las que resultó ganador el comunista Pedro Castillo, hoy internado en un penal mientras es investigado por los presuntos delitos de rebelión y conspiración tras intentar un golpe de Estado en diciembre de 2022.
Fuerza Popular, cuya candidata Keiko Fujimori fue derrotada por un margen de casi 45 mil votos, asumió junto a Renovación Popular y Avanza País la oposición más férrea contra Castillo y Perú Libre, cuyo ideario y programa de extrema izquierda, además de sus coqueteos con la subversión y las economías informales (cocaleros, mineros y taladores), ponían en riesgo la estabilidad económica e institucionalidad de una república que ya tambaleaba por los estragos del covid-19 y los excesos populistas del expresidente Martín Vizcarra.
Esta distancia «irreconciliable» entre fujimoristas y perulibristas parecía entonces insalvable, pero una vez que sus intereses coincidieron en el Parlamento, como su desprecio común al grupo denominado «caviares» -la centroizquierda burguesa peruana, afín a la ideología de género, el feminismo y la agenda 2030-, no tardaron mucho en votar en la misma línea y en «coquetearse» mutuamente.
Estos coqueteos, finalmente, resultaron en la alianza que les ha permitido compartir asientos en la Mesa Directiva, por más que sus voceros, tanto de un lado como del otro, insistieran en que era imposible tal cosa.
Sin embargo, una vez que esta lista se oficializó, no le quedó a Perú Libre más que aceptarla, aunque su vocero llegó a afirmar que no era una alianza, sino una «integración de candidaturas».
Lo cierto es que esta «integración de candidaturas» provocó la renuncia de tres integrantes de Perú Libre, quienes repudiaron la alianza con el fujimorismo, pues la consideran una suerte de “traición” contra sus votantes.
La presidencia «saludó» la elección de Soto
La Presidencia del Perú saludó este miércoles por la tarde la elección de la nueva Mesa Directiva del Congreso para el período de sesiones 2023-2024, liderada por el congresista Alejandro Soto (Alianza para el Progreso), e integrada por los congresistas Hernando Guerra-García (Fuerza Popular), Waldemar Cerrón (Perú Libre) y Rosselli Amuruz (Avanza País).
A través de Twitter, presidencia reiteró el compromiso del gobierno con la democracia y destacó la importancia de trabajar conjuntamente en beneficio de los más de 33 millones de peruanos, respetando la separación e independencia de poderes.