RAFAH — Aviones israelíes de combate atacaron objetivos en diferentes lugares de Gaza durante la noche y el domingo por la mañana, así como dos aeropuertos en Siria y una mezquita en la ocupada Cisjordania utilizada por milicianos, mientras la guerra con Hamás iniciada hace dos semanas amenaza con desencadenar un conflicto más amplio.
El grupo terrorista libanés Hezbollah ha lanzado ataques contra Israel casi a diario desde que comenzó la guerra y el Estado hebreo ha respondido. Mientras las tensiones están disparadas en Cisjordania, un territorio ocupado por Israel donde las fuerzas israelíes combaten con milicianos en campos de refugiados y han realizado dos ataques aéreos en los últimos días.
Hace días que Israel parece a punto de lanzar una ofensiva terrestre en Gaza como parte de su respuesta al letal ataque de Hamás el 7 de octubre. Se han acumulado tanques y decenas de miles de soldados en la frontera, y los líderes israelíes han aludido a una fase posterior no especificada en las operaciones.
Durante el inicio del ataque terrorista más de 1.400 israelíes perdieron la vida, la mayoría de ellas civiles que sufrieron diversas atrocidades, como disparos, incendios y mutilaciones antes de ser asesinados.
Ayuda humanitaria a Gaza
El domingo se permitió la entrada de otro convoy de 17 camiones con ayuda desde Egipto a Gaza, según medios estatales egipcios. Era el segundo cargamento de ayuda que llega al territorio desde que Israel impuso un asedio total hace dos semanas. El sábado pasaron 20 camiones.
La apertura del paso ocurre tras la gestión de Estados Unidos y la visita a Israel del presidente Joe Biden, que solicitó al primer ministro Benjamín Netanyahu permitir el ingreso de ayuda humanitaria para los civiles en Gaza. Israel había insistido en que nada entraría a Gaza hasta que los cerca de 200 rehenes capturados por el grupo terrorista Hamás fuesen liberados. Sin embargo, Israel accedió a la solicitud de Estados Unidos.
El acceso se origina tras la liberación de dos rehenes estadounidenses. Se trata del episodio que ha marcado el peor ataque en Israel desde su creación en 1948, resultó en la desaparición de entre 100 y 200 personas.
Los cooperantes dijeron que no bastaba ni de lejos para abordar la creciente crisis humanitaria en Gaza, donde la mitad de los 2,3 millones de habitantes han huido de sus hogares. La agencia humanitaria de Naciones Unidas, conocida por sus siglas OCHA, dijo que el convoy que entró el sábado llevaba en torno al 4% de la media de importaciones diarias antes de la guerra”.
El ejército israelí dijo que la situación humanitaria estaba “bajo control”, mientras que OCHA, pidió que entrasen 100 camiones al día.
Israel reitera petición a civiles de abandonar zona de guerra
Israel reiteró sus peticiones de que la gente salga del norte de Gaza, lo que incluía arrojar folletos desde el aire. Añadió que unas 700.000 personas ya habían huido, aunque quedaban cientos de miles. Eso aumentaría el riesgo de enormes bajas civiles en cualquier ofensiva terrestre.
Mandos militares israelíes dicen que la infraestructura y la red de túneles de Hamás se concentran en Ciudad de Gaza, en el norte, y que la próxima fase de la ofensiva incluirá una fuerza sin precedentes allí. Israel dice que quiere aplastar a Hamás, pero miembros del gobierno han hablado de establecer una posible zona de separación para impedir que los palestinos se acerquen a la frontera.
Los ataques aéreos continuaban en diferentes zonas de Gaza, incluida la parte sur de la franja costera, donde Israel ha dicho a los civiles que se refugien.
El ejército israelí dijo que atacaba a miembros e instalaciones de Hamás, pero que no dirigía sus ataques contra civiles. Milicianos palestinos han lanzado unos 7.000 cohetes contra Israel, según el ejército, que según Hamás atacaron Tel Aviv el domingo por la mañana.
El ejército dijo que Israel tenía previsto incrementar los ataques aéreos en preparación para “las siguientes fases de la guerra”.
Más de 1.400 personas han muerto en Israel en la guerra, la mayoría civiles asesinados durante el ataque inicial de Hamás. Al menos 212 personas fueron secuestradas y llevadas a la fuerza a Gaza, incluidos hombres, mujeres, niños y ancianos. Dos estadounidenses fueron liberadas el viernes en lo que Hamás describió como un gesto humanitario.
Más de 4.300 personas han muerto en Gaza, según el Ministerio de Salud controlado por Hamás. Eso incluye la cifra disputada de víctimas por una explosión en un hospital.
Israel dice haber detenido a más de 700 palestinos desde el 7 de octubre, incluidos 480 supuestos miembros de Hamás.
Las fuerzas israelíes mataron al menos a cinco personas el domingo por la mañana en Cisjordania, según el Ministerio de Salud palestino. Dos murieron en un ataque aéreo contra una mezquita en la localidad de Yenín, que ha registrado intensos tiroteos entre milicianos palestinos y tropas israelíes en el último año.
El ejército israelí dijo que el complejo de la mezquita pertenecía a Hamás y a milicianos de Yihad Islámica que cometieron varios ataques en los últimos meses y planeaban otro.
La Autoridad Palestina, que cuenta con reconocimiento internacional, administra zonas de Cisjordania y coopera con Israel en seguridad, pero es muy impopular y ha sido blanco de violentas protestas palestinas.