WASHINGTON- El presidente #45 de Estados Unidos, Donald Trump, el gran favorito en las primarias republicanas para las elecciones presidenciales de noviembre, advirtió que procesar a un expresidente causará un posible «caos» en la nación.
Los jueces de una Corte de Apelaciones de Washington DC se mostraron un poco escépticos de que Trump tenga inmunidad penal como Presidente al examinar este martes un recurso, según interpretaciones de la prensa con tendencia liberal.
La vista judicial tuvo lugar en plena campaña electoral, a menos de una semana del inicio el lunes de las primarias republicanas en Iowa.
Trump acudió este martes a un Corte Federal en Washington DC, pese a no estar obligado a ello, y escuchó en silencio los alegatos antes de hablar con los periodistas.
«Es muy injusto cuando un oponente político es procesado por el (Departamento de Justicia)» del presidente en el poder: Joe Biden, mi probable rival electoral, dijo Trump después de una vista en la Corte de Apelaciones de Washington DC que examina su petición de inmunidad presidencial.
Esto «Abrirá la caja de Pandora» y «será un caos el país», puntualizó el expresidente, quien ha consolidado su liderazgo republicano y marcha al frente en todas las encuestas, tanto para las primarias como para las presidenciales contra seguramente Joe Biden, de acuerdo con los indicios que da el Comité Nacional Demócrata.
Abogados de Trump piden inmunidad total
Los abogados de Donald Trump aducen que goza de «inmunidad absoluta» por haber sido Presidente. Citan jurisprudencia de la Corte Suprema de los años 1980 sobre las demandas civiles contra el exmandatario Richard Nixon.
También argumentan que no puede ser juzgado por haber intentado presuntamente alterar los resultados, debido a que fue absuelto de ello en un juicio político en el Congreso por los sucesos frente y dentro del Capitolio el 6 de enero de 2021.
«Autorizar el procesamiento de un Presidente por sus actos oficiales abriría una caja de Pandora de la que esta nación podría no recuperarse nunca», estimó el abogado de Trump, John Sauer.
El recurso interpuesto por los abogados de Trump ha suspendido el procedimiento, lo que podría desbaratar el calendario del juicio, cuyo inicio está previsto para el 4 de marzo, según el fiscal especial Jack Smith, que investiga el caso.
Trump, sin ninguna necesidad de estar presente, compareció ante el tribunal federal para argumentar que, como expresidente, debe tener inmunidad ante el procesamiento por cargos de supuesta conspiración para revertir el resultado de las elecciones de 2020, una campaña emprendida por la izquierda y la extrema izquierda en el país para desacreditarlo e inhabilitarlo.
Esta es la peor acción antidemocrática en la historia de Estados Unidos contra un expresidente y favorito precandidato para llegar a la Casa Blanca, como afirman senadores y representantes republicanos en el Congreso que han cerrado filas junto a Trump.
Trump presentó su alegato oral ante un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito de Washington DC.
Los abogados de Trump han tratado de anular los cargos de interferencia electoral prefabricados con el importante argumento de que un expresidente (2017-2021) goza de «inmunidad absoluta» y no puede ser procesado por decisiones u opiniones durante su mandato en la Casa Blanca.
La mayor campaña antidemocrática
Estaba previsto que el claro favorito para ganar la candidatura presidencial del Partido Republicano para las elecciones de 2024 fuera juzgado el 4 de marzo en un tribunal de Washington.
Los sucesos del Capitolio el 6 de enero de 2021 se han convertido en la mayor campaña antidemocrática de la izquierda radical para sacar del camino de Biden al oponente que lo puede vencer en noviembre.
Las dudas de decenas de millones de estadounidenses sobre la supuesta victoria electoral en 2020 de Joe Biden nunca se han disipado; por el contrario, aumentan debido a la desesperación de los nuevos demócratas y sus incesantes intentos de evaporar de la política al exmandatario republicano, lo que demuestra su amplia popularidad y sus grandes posibilidades de un segundo período presidencial.
La jueza de distrito estadounidense Tanya Chutkan, quien presidirá el juicio, rechazó el pedido de inmunidad el mes pasado.
Trump apeló la decisión y presentará sus argumentos ante un panel de tres jueces: dos de ellos fueron nombrados por Joe Biden, mientras que el tercero fue nombrado por el expresidente republicano George H.W. Bush (1989-1993). Como es de suponer, tiene a los tres en su contra, porque George W. Bush se ha convertido en un acérrimo enemigo de Trump, a pesar de ser también republicano.
Las cosas cambiaron cuando Trump, durante la campaña electoral para las primarias de 2016, le llamó «incapaz y corrupto» al exgobernador de Florida, Jeb Bush, hermano del expresidente Bush.
El gran dilema
El exmandatario, de 77 años, advirtió en su red social Truth Social que un rechazo de su defensa a la inmunidad solicitada podría conducir también a causas judiciales contra Biden si vuelve a la Casa Blanca: «¡Lo mínimo a lo que tengo derecho es a la inmunidad presidencial ante acusaciones falsas de Biden!», afirmó.
Derek Muller, profesor de derecho en la Universidad de Notre Dame, considera poco probable que Trump, el primer expresidente de Estados Unidos en enfrentar cargos judiciales, pueda salir airoso por inmunidad: «Mi sensación es que Trump tendrá una batalla cuesta arriba».
La opinión de este experto se basa en la política de doble rasero implementada por el Departamento de Justicia bajo el poder de Biden y los nuevos demócratas. Una institución que debe ser independiente por su propia función, se ha covertido en un apéndice de la Casa Blanca y de la ideología de izquierda, como han denunciado los republicanos.
«Si no obtengo inmunidad, entonces el corrupto Joe Biden no tendrá tampoco la inmunidad», sentenció Trump al referirse al inquilino demócrata en Washington, de 81 años y precandidato para la reelección en 2024, con capacidades físicas y mentales visiblemente mermadas.
Pero como si no bastara, ahora las cortes estatales en varios estados han iniciado una guerra, al parecer planificada, contra la partipación de Trump en las boletas de las primarias en algunos estados, casi todos gobernados por los nuevos demócratas y la extrema izquierda.
Ya 11 estados se han negado a sacar a Trump de la boleta porque es inconstitucional. La claúsula de la 14 enmienda de la Constitución de la que se han agarrado estos tribunales, bajo la presión de la Casa Blanca y de la extrema izquierda, no menciona al Presidente del país.
Pero en caso de que la interpretación sea errónea, Trump NO ha sido condenado legalmente por ningún delito de conspiración y menos de «ataque a la constitición de EEUU».
Ante la negativa de la Corte Suprema de Nevada de sacar a Trump de la boleta para las primarias, su portavoz de campaña, Steven Cheung, emitió el siguiente comunicado.
«El rechazo de otro intento falso, de mala fe y corrupto diseñado por Joe Biden para privar a los estadounidenses y a los electores de Nevada, específicamente, de su derecho a votar por el candidato de su elección no es sólo una victoria para el presidente Trump, sino para todos los estadounidenses y el pueblo de Nevada».
«El presidente Trump sigue invicto en los tribunales federales contra estos esfuerzos cínicos de interferir en las elecciones de 2024. Los tribunales de 11 estados han desestimado casos similares y patéticos de votación de la 14ª Enmienda. Todos y cada uno de estos «desafíos electorales» son intentos descarados de regalar las elecciones al corrupto Joe Biden y privar de sus derechos a más de 100 millones de votantes estadounidenses».
«El presidente Trump es el principal candidato no sólo para las primarias republicanas, sino también para las elecciones generales y sus oponentes están desesperados. Tengan la seguridad de que él luchará contra todos y cada uno de estos vergonzosos ataques a la democracia estadounidense y finalmente ganará», concluyó el portavoz Cheung.
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