SAN SALVADOR.- Una cifra récord de 51.226 salvadoreños residentes en el extranjero han votado en las elecciones presidenciales de El Salvador en los primeros tres días desde que el país habilitó por primera vez el voto electrónico desde el extranjero, según confirmaron dos funcionarios electorales.
Se espera que el voto del extranjero sea favorable al presidente, Nayib Bukele, que se presenta a la reelección y cuyo gobierno introdujo el sistema de voto a través de internet. Bukele, que ganó por un margen de unos 600.000 votos en las elecciones pasadas de 2019, ya era el favorito en los comicios.
El mandatario es inmensamente popular entre los salvadoreños después de años de campaña contra la violencia de las pandillas, aunque líderes de oposición y observadores lo acusan de «socavar la democracia con detenciones arbitrarias y erosionar poco a poco el sistema de garantías y equilibrios constitucionales».
Sin embargo, El Salvador ha logrado reducir la violencia de las pandillas. De ser uno de los países con mayor índice de criminalidad, la nación centroamericana ocupa el menor registro de violencia en el mundo.
La actual cifra de votantes en el exterior es doce veces el número de personas que votaron fuera del país en los comicios de 2019, cuando apenas sufragaron 3.808 salvadoreños.
Se estima que una de cada cuatro personas del país centroamericano de 6.3 millones de personas vive en el extranjero, la mayoría en Estados Unidos. Los votantes fuera del país tienen casi un mes para votar antes de las elecciones del 4 de febrero.
Importancia para Bukele
El incremento del voto extranjero subraya la creciente importancia política de la diáspora salvadoreña para Bukele, que aspira a mantenerse en el poder pese al veto constitucional a la reelección.
Para el lunes por la mañana, 45.832 personas en el extranjero habían votado para el Congreso de El Salvador, según dos funcionarios electorales, que solicitaron mantenerse en el anonimato porque no estar autorizados a comentar el tema.
Milena Mayorga, embajadora salvadoreña en Estados Unidos, dijo que los nuevos sistemas responden a años de solicitudes de la diáspora del país, muchos de los cuales emigraron a Estados Unidos huyendo de la violencia de las pandillas y la pobreza.
«Para el presidente Bukele, todos los salvadoreños, independientemente de dónde se encuentren, son importantes”, afirmó Mayorga.
La embajadora dijo que el aumento sin precedentes de sufragios reflejaba el éxito de Bukele en su guerra contra las pandillas.
“Indiscutiblemente, todos los salvadoreños ven el cambio que se ha dado en el país y muy probablemente voten para que ese cambio y esa seguridad que ahora existe se siga manteniendo”, añadió.
Herramienta política
Bukele disfruta de unos altos índices de popularidad desde que comenzó su brutal guerra contra pandillas en El Salvador hace casi dos años, que incluyó suspender derechos constitucionales y encerrar a decenas de miles de personas.
Las tiendas de recuerdos venden gorras, imanes y camisetas con la imagen de Bukele que piden su reelección.
En el extranjero, un sondeo realizado en noviembre de 2021 por el Centro de Investigación y Estudios Sociales y Económicos de Centroamérica (Ciesca) encontró un apoyo abrumador a la reelección del presidente entre la diáspora salvadoreña.
César Pocasangre, un salvadoreño de 42 años residente en Francia, fue uno de los que votó a Bukele esta semana a través de internet. Señaló que muchos salvadoreños como él que viven fuera del país apoyan al mandatario porque han visto cambiar la reputación de su país.
“Constatamos por medio de nuestras familias que la gente encuentra mejores condiciones de vida en El Salvador,” dijo. “Hay gente que está de acuerdo y gente que no está de acuerdo, pero el presidente siempre lleva a cabo su plan”, reflexionó.
Pocasangre dijo que votar le tomó apenas dos minutos y que el proceso fue intuitivo, sencillo y parecía seguro.
Dudas sobre el sistema de votación
Sin embargo, observadores como Ana María Méndez, analista para Centroamérica de la Oficina de Washington sobre América latina, una organización de derechos humanos sin fines de lucro, expresó su preocupación por el sistema de voto.
La analista se sumó a observadores y miembros de la oposición salvadoreña al decir que había muy poca transparencia o supervisión sobre el sistema de voto internacional.
En los últimos años, el gobierno de Bukele ha sido acusado de desequilibrar el terreno de juego con prácticas como acoso rutinario a la oposición política y organismos supervisores y una reforma electoral que consolidó su ya firme control sobre el poder.
Méndez dijo que el nuevo sistema podría allanar el camino para la manipulación de votos y que “no hay modo de verificar o auditar la votación”. Añadió que los sufragios en el extranjero, que se contabilizarán todos en la circunscripción de la capital, según la reforma electoral de Bukele, probablemente tendrán un impacto desproporcionado.
“Estamos muy preocupados por esta falta de transparencia y clara falta de normas y reglas en torno a esta votación”, dijo. “La falta de garantías y equilibrios y la concentración de poder que tiene Bukele es preocupante para cualquier democracia”, alertó.
El gobierno restó importancia a esas preocupaciones y dijo que no ha recibido ninguna denuncia formal sobre el sistema de otros candidatos o partidos.
«Nosotros, como Gobierno, somos los más interesados en el que el proceso se realice con total tranquilidad y transparencia», afirmó Mayorga.