Estados Unidos busca crear en América Latina un epicentro de fabricación de microchips, también conocidos como semiconductores, esenciales en aparatos tecnológicos y, sobre todo, en aquellos que incorporan inteligencia artificial. El país elegido es Costa Rica, que junto a la Administración Biden organizará la primera de una serie de conferencias donde participarán políticos, inversores y expertos en el rubro.
La nación centroamericana también albergará un centro educativo, llamado “Centro de Excelencia”, para dar entrenamiento técnico a trabajadores y expertos en la región en temas de manufactura de “semiconductores, ciberseguridad y otros campos de la economía digital”, según un comunicado de la Casa Blanca.
Para entender esta decisión es necesario mencionar que el gobierno demócrata busca competir con los avances tecnológicos de China, ya que el gigante asiático también es una potencia en fabricación de microchips. El cuarto, para ser exactos, después de Taiwán, Japón y EE. UU. Pero lo que más preocupa a Washington es el desarrollo del régimen comunista chino en capacidades militares y tecnológicas, para lo que necesita semiconductores.
El próximo “centro tecnológico” en Costa Rica
El gobierno de Rodrigo Chaves podría estar liderando uno de los proyectos más ambiciosos en materia tecnológica de América Latina. Desde el año pasado ya era posible percatarse de los planes de Estados Unidos en el país centroamericano cuando lo hizo beneficiario de un fondo internacional aprobado en la Ley de Chips y Ciencia, promulgada entonces.
Fue Costa Rica la que se postuló para ser beneficiaria de los fondos y crear un “hub o centro tecnológico regional dedicado a la investigación”, reseñó El Economista. La embajada estadounidense aseguró que dieron el visto bueno porque ven al país “como un socio importante para garantizar que la cadena de suministro de semiconductores pueda seguir el ritmo de transformación actual”.
Hay precedentes que contribuyeron a que Washington pusiera el foco a la nación centroamericana: es la única en la región que aloja una planta de ensamble de prueba de Intel y también es conocida por exportar equipos tecnológicos. ¿Se convertirá Costa Rica en la pieza clave de Estados Unidos para contrarrestar los avances del comunismo chino? Por los momentos aún hay un largo camino que recorrer. Si Biden quiere prescindir del mercado asiático, incluyendo a Taiwán, deberá tener en cuenta que en dicho país se produce más del 60 % de los michrochips que se usan en todo el mundo.
Pactos regionales con China
El gobierno de Biden asevera que EE. UU. busca crear cadenas de suministros en naciones aliadas. Sin embargo, China también le hace competencia en esta materia. Cada vez más países latinoamericanos cierran acuerdos con Pekín para que explote sus recursos naturales y eso termina facilitándole a Xi Jinping mayor influencia en la región. Bolivia, Nicaragua, Argentina, Chile, y más recientemente Colombia, sellaron alianzas que entregan al enemigo de EE. UU. el control sobre el litio y otros recursos.
Hasta los momentos, Washington insiste con buscar “reforzar la competitividad” de la región para que pueda “apoyar la industria y la capacidad” de la economía norteamericana. Por eso anunció este “Centro de Excelencia” en Costa Rica durante la primera cumbre de la Alianza para la Prosperidad Económica (APEP), celebrada en la Casa Blanca. Por su parte, el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, y su ministro de Comercio Exterior, Manuel Tovar, se reunieron con representantes de la Asociación de Industrias de Semiconductores (SIA, por sus siglas en inglés), para avanzar en este proyecto que pondría al país a la vanguardia de la fabricación de microchips en América Latina.