Washington, 12 dic (EFE).- La Cámara de Representantes de Estados Unidos votará esta semana, antes de su receso navideño, formalizar la investigación de juicio político (impeachment) contra el presidente Joe Biden, que algunas comisiones legislativas hace semanas llevan a cabo.
Así lo anunció este martes el presidente de la Cámara baja, el republicano Mike Johnson, dejando abierta la puerta a que el voto sea entre el miércoles y el jueves.
“Las pruebas acumuladas contra el presidente Biden no se pueden ignorar”, apuntó en un artículo publicado en USA Today.
Los republicanos abrieron en septiembre pasado la investigación contra Biden que llevaría a un juicio político, aunque no la sometieron a votación de la plenaria, un trámite que se formalizará esta semana y que les permitirá reclamar la colaboración del presidente, su entorno y la Casa Blanca.
Los negocios de Hunter Biden
A Joe Biden lo acusan de haber usado su influencia a lo largo de su carrera política para favorecer los negocios en el extranjero de familiares, con especial foco en su polémico hijo Hunter.
De hecho, Hunter Biden fue citado a declarar a puerta cerrada este miércoles ante uno de esos comités que investigan la causa, pero no está claro que cumpla la citación.
El hijo del presidente está imputado en dos procesos, uno por evasión de impuestos y otro por posesión ilegal de armas.
Según Johnson, la familia Biden recibió más de 15 millones de dólares de empresas y los Gobiernos de Ucrania, Rusia, Kazajistán, Rumanía y China entre 2014 y 2019. Sus socios habrían recibido otros 9 millones de dólares.
También acusan a Biden de haberse reunido al menos 22 veces con socios extranjeros de su hijo.
Republicanos confiados
Los republicanos habían evitado hasta el momento someter el juicio político contra Biden a votación de la plenaria de la Cámara de Representantes, ya que con su ajustada mayoría (221-213) necesitan que casi todos sus miembros lo apoyen.
Varios de los congresistas conservadores tienen un perfil moderado y fueron elegidos en distritos en los que Biden ganó las elecciones presidenciales, por lo que podrían preferir no tener que asumir esa decisión.
El hecho que el liderazgo republicano se sienta cómodo sometiendo el impeachment a votación significa que lo más probable es que estos legisladores considerados moderados van a apoyar formalizar la investigación.
El freno demócrata en el Senado
El congresista Pete Aguilar, presidente del caucus demócrata en la Cámara baja, dijo en una rueda de prensa en el Capitolio que “la votación de esta semana es el culmen de la agenda extremista que los republicanos llevan un año desarrollando”.
“Obviamente -añadió- quieren perjudicar al presidente Biden para distraer del hecho de que han convertido este hemiciclo en el menos productivo en la historia del Congreso”.
Si la investigación que los republicanos quieren formalizar esta semana arroja frutos, deberán redactar una acusación, lo que se conoce como “artículos de impeachment“, que tendrán que ser sometidos de nuevo a votación de la Cámara baja.
En caso de que esos artículos sean aprobados solo con una mayoría simple, el Senado -donde los demócratas tienen mayoría- deberá realizar un juicio político contra el presidente Joe Biden.
El mandatario demócrata solo sería destituido de su cargo si dos terceras partes de esa cámara votan en ese sentido, un panorama imposible de imaginar en el actual contexto político.