Una investigación del Centro de Estudios de Inmigración (CIS) denunció el jueves que el Gobierno de Joe Biden habría permitido en 2023 la entrada de al menos 320.000 inmigrantes ilegales a través de vuelos secretos que llegaron a 43 aeropuertos de los Estados Unidos.
De acuerdo al CIS, que ha demandado al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de los Estados Unidos, la acción se habría hecho con anuencia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), utilizando además el programa CBP One de dicha institución.
La medida tendría como objeto disminuir la presión migratoria que experimenta actualmente la frontera sur de los Estados Unidos, que ha registrado un alarmante incremento durante el último año.
El reporte de CIS apunta a localidades como Houston, Florida y California como las más utilizadas para recibir este tipo de vuelos. Los países de procedencia de los migrantes serían nueve: Venezuela, Colombia, Haití, Cuba, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Ecuador y Honduras.
De igual modo, señala que dichas personas estarían ingresando a Estados Unidos bajo un supuesto programa de «libertad condicional», también referido por el Ejecutivo como «Programa Avanzado de Autorización de Viaje» y «Programa CHNV», de acuerdo a información publicada por The Epoch Times.