WASHINGTON — La decisión de la Corte Suprema de Colorado, que declaró al expresidente Donald Trump no «elegible» para las primarias en ese estado, fue criticada de manera enérgica como «injerencia electoral» por parte de los republicanos.
La sentencia de los jueces de Colorado, nombrados por gobernadores demócratas, ocurre a solo un mes de las primarias de cara a las elecciones de 2024 y cuando el presidente 45 de EEUU marcha al frente de todas las encuestas nacionales; incluso, respecto a Joe Biden y en sondeos de tendencia liberal.
Representantes, senadores, líderes conservadores y candidatos a la presidencia, rechazaron el fallo que prohíbe a Trump estar en la boleta de votación de ese estado por su presunta «participación» en los sucesos del 6 de enero en el Capitolio.
«El fallo de la Corte, que busca descalificar al presidente Trump de las primarias de Colorado, es un ataque partidista apenas velado», fustigó el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson.
«Es una injerencia electoral flagrante», denunció el influyente legislador conservador Steve Scalise.
«Vivimos en una democracia, no en una república bananera», añadió por su parte el republicano Randy Weber.
El expresidente de 77 años, a quien los demócratas y la extrema izquierda tratan de sacarlo de la contienda electoral, consolida cada vez más su apoyo para las elecciones presidenciales de 2024.
«Cada asunto contra el que batallo es obra del Departamento de Justicia y de la Casa Blanca», replicó Trump en su red Truth Social, anticipándose al tipo de intercambios que tendrán casi seguramente ambos en 2024.
Biden endureció el tono el miércoles al afirmar que su predecesor «ciertamente apoyó una insurrección» el 6 de enero de 2021. Trump es el favorito en la contienda de las primarias republicanas, y las encuestas a nivel nacional lo ubican con ventajas sobre Biden.
Por lo general, Biden no comenta sobre los casos judiciales que promueve contra Trump el Departamento de Justicia, dirigido por su administración, que no actúa con la misma beligerancia respecto a las acusaciones contra el hijo de Biden, Hunter Biden por presunta corrupción.
Candidatos rivales también lo apoyan
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, el más cercano rival de Trump por la investidura republicana, se mantuvo entre los que lo apoyan, junto a la candidata Nikki Haley y Vivek Ramaswamy.
El fallo en Colorado debe ser «anulado por la Corte Suprema» de Estados Unidos, dijo DeSantis.
Por su parte, Haley declaró: «No necesitamos jueces que tomen este tipo de decisiones, sino a los votantes».
«En una decisión antiestadounidense, inconstitucional y sin precedentes, un grupo de jueces demócratas están excluyendo a Trump de la votación en Colorado», escribió Vivek Ramaswamy, el empresario de tecnología de 38 años.
«Después de haber intentado todos los trucos posibles para eliminar al presidente Trump de su candidatura en esta elección, el establishment partidista ahora utiliza una nueva táctica para impedirle volver a ocupar el cargo: la 14ª Enmienda», condenó airado.
Ramaswamy prometió retirarse de las elecciones primarias del Partido Republicano en Colorado y denominó el fallo como “un ataque directo a la democracia” y llamó a los demás candidatos a hacer lo mismo contra “esta maniobra ilegal que tendrá consecuencias desastrosas para nuestro país”.
El fallo ocurre en momentos en que la Corte Suprema de Estados Unidos tiene en sus manos tres casos de apelaciones a condenas sobre los sucesos del 6 de enero de 2021 en Washington, que podrían cambiar sentencias similares y dar un giro a las acusaciones contra Trump.
Saltan las alarmas
El fallo del tribunal el 19 de diciembre por 4 a 3 está detenido por apelaciones de los abogados del exmandatario y se centra en la «cláusula de insurrección» de la 14ta Enmienda, que prohíbe a los funcionarios que hayan participado en «insurrección o rebelión» ocupar cargos públicos.
Trump no ha sido sentenciado ni declarado culpable, por ninguna corte estatal ni federal, de incitar ni participar en rebelión alguna, mucho menos contra Estados Unidos como se afirma en la 14ta enmienda utilizada ahora como arma política por lo nuevos demócratas. Tampoco la legislación menciona explícitamente el cargo de Presidente de la nación.
La sentencia del Supremo de Colorado, según expertos conservadores y legisladores, ha sido una decisión errónea e irresponsable y bajo la influencia política de un partido, que la aleja de la justicia real estadounidense, con la única intención de descalificar a un candidato opositor que posee una clara ventaja sobre el posible candidato del partido en el poder.
Los demócratas, en un punto visible de desesperación, tienen bien claro que ninguna otra ficha republicana, que no sea Trump, cuenta con la aprobación mayoritaria y la capacidad para llegar a la Casa Blanca; y han emprendido una guerra política de «SE VALE TODO».
Trump cuenta con una ventaja para las primarias republicanas de más de 50 puntos sobre su rival más cercano, el gobernador de Florida Ron DeSantis y entre seis y ocho puntos sobre Joe Biden para las elecciones presidenciales en noviembre de 2024.
El tribunal superior de Colorado determinó que el presidente Trump «había participado en una insurrección durante la irrupción del Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero de 2021», una aseveración sin fundamento legal ni sentencia anterior como precedente.
Trump sólo enfrenta acusaciones. ¿Cómo es posible tal sentencia de un Tribunal Superior estatal, cuando la Constitución de EEUU afirma que toda persona es inocente ante la ley hasta que se pruebe y se demuestre lo contrario?
A pesar de que el fallo sólo se aplica a las primarias republicanas de Colorado, que están programadas para el 5 de marzo, sienta otro grave precedente para la democracia en EEUU y suma otro insólito elemento para la credibilidad del sistema judicial estadounidense.
La 14ª Enmienda, ratificada después de la Guerra Civil, fue aprobada para prohibir a los exlíderes militares y políticos confederados ocupar altos cargos federales o estatales.
«Estos hombres habían participado en una rebelión contra Estados Unidos: la Guerra Civil. Esto hace aún más absurdo que un grupo de izquierda en Colorado pida a un tribunal federal que descalifique al 45º Presidente por los mismos motivos, equiparando su discurso a una rebelión contra Estados Unidos», concluyó Ramaswamy.
Serios problemas legales del fallo
La sentencia del 19 de diciembre revoca un fallo en noviembre de la jueza del Tribunal del Segundo Distrito de Colorado, Sarah Wallace, que exoneraba al presidente Trump de una supuesta insurrección el 6 de enero de 2021, porque la Sección 3 de la 14ta Enmienda no se aplica a los presidentes.
Ramaswamy también indicó un «problema legal» con la redacción específica de la cláusula.
«Trump no es un ‘exfuncionario de Estados Unidos’, como se utiliza ese término en la Constitución, lo que significa que la Sección 3 no se aplica», dijo.
«Los redactores de la 14ta Enmienda estarían consternados al ver que esta estrecha disposición sea utilizada como arma por un Presidente en ejercicio y sus aliados políticos para impedir que un expresidente busque la reelección».
«Nuestro país se está volviendo irreconocible para nuestros padres fundadores», concluyó.
Esta nueva estratagema de la izquierda contra Trump, irreconocible dentro del respeto a los valores democráticos y constitucionales de EEUU, puede desencadenar una falta de credibilidad y manipulación nunca antes vista sobre le ley y con el propósito de eliminar a la oposición para favorecer a un candidato político, al mejor estilo de las dictaduras en el mundo.
Colorado es uno de los estados dominado por la izquierda y la extrema izquierda del país, que se ha lanzado en una ofensiva y distorsión desaforadas contra todas las bases conservadoras en las que se fundó la Gran Nación Americana