CIUDAD DE GUATEMALA.- La situación política en Guatemala se intensificó luego de que un juez guatemalteco ordenara este jueves la captura de cuatro magistrados electorales que abandonaron el país tras perder su inmunidad en noviembre, acusados de corrupción en la adquisición de un software para las elecciones, según informó la Fiscalía.
Estos acontecimientos surgen a tan solo tres días de la toma de posesión del presidente electo, Bernardo Arévalo, quien pese a que asumirá el cargo afirma «ser blanco» de la Fiscalía para obstaculizar su asunción.
El vocero del Ministerio Público, Moisés Ortiz, confirmó las órdenes de aprehensión, incluida la emitida contra Irma Palencia, expresidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), responsable de organizar las elecciones del año pasado. Además, se ordenó la captura de los magistrados titulares del TSE, Gabriel Aguilera, Ranulfo Rojas y Mynor Franco, acusados de abuso de autoridad y fraude.
Estos cuatro magistrados, a solicitud de la Fiscalía, perdieron su inmunidad el 30 de noviembre pasado por decisión del Congreso, controlado por el oficialismo. La investigación del Ministerio Público se centra en la presunta compra a sobreprecio de un sistema informático de transmisión de resultados electorales utilizado en las elecciones de junio y agosto que condujeron a la victoria de Arévalo.
En un contexto internacional tenso, dos semanas después de retirar la inmunidad, Estados Unidos sancionó a 300 guatemaltecos, incluyendo un centenar de diputados, supuestamente por intentar «socavar» la democracia.
El izquierdista Bernardo Arévalo, de 65 años, asumirá la presidencia el próximo domingo. La fiscal general, Consuelo Porras, considerada «corrupta» por la administración del demócrata Joe Biden, ha buscado quitar la inmunidad al presidente electo y logró suspender a su partido Semilla mediante una decisión judicial, señalado de haber cometido actos irregulares para llegar al poder