«Queremos hacer algunas alianzas en la región, creemos que México puede ser un buen candidato para hacer una producción conjunta», adelantó a Sputnik Mirta Iriondo, quien hasta recientemente ocupaba su lugar como la primera decana de la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).El 11 de febrero, Fadea recibió la certificación de la Agencia Nacional de Aviación Civil de Brasil para brindar servicios de mantenimiento a los más de 100 aviones Airbus 320 que operan en el país vecino. Además, la empresa continúa con sus proyectos de producción, mantenimiento y modernización de aeronaves tanto militares como comerciales.
La fábrica, localizada en la provincia de Córdoba, cuenta con un acuerdo de producción de partes de aviones militares de la compañía brasileña Embraer y contratos de mantenimiento de aeronaves comerciales de algunas empresas comerciales locales.
Tiene programada la entrega de cuatro nuevos aviones militares de entrenamiento IA-63 Pampa (III) de diseño y fabricación nacional en los próximos años y la ambición de aumentar la construcción a seis de estas aeronaves por año, además del objetivo de concretar contratos bilaterales para la producción del IA-100, un avión acrobático de entrenamiento civil y militar en etapa de prototipo.
«Extender la vida útil de los equipos y vehículos militares es importante para las Fuerzas Armadas de nuestro país, por eso seguimos con los proyectos de modernización de los [IA-58] Pucará y [C-130] Hércules. Fadea es una empresa estratégica y tenemos que sostenerla con políticas de Estado», dijo Iriondo.
Una historia personal marcada por la historia política
Hoy doctora en Matemáticas y magíster en Ingeniería Física, Iriondo comenzó a trabajar desde muy jóven como costurera y también a militar sindicalmente en el peronismo de bases, razón por la que, con tan solo 20 años y junto a su hijo recién nacido, fue secuestrada por las fuerzas de seguridad durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983).Estuvo secuestrada desde junio de 1977 hasta octubre de 1978 en el centro clandestino de detención de La Perla, en Córdoba. Años más tarde, luego de volver al país en 1996 de su exilio en Suecia, ingresó a trabajar en el Instituto Universitario Aeronáutico, ubicado enfrente de las instalaciones del ahora sitio de memoria.
Iriondo contó que regresó a la militancia peronista y sindical desde su vuelta al país y acompañó a lo que después se transformó en el kirchnerismo ya desde 2002. Fue subdirectora de Investigación Científica y Desarrollo y Tecnológico y anteriormente directora de Planificación Industrial en el Ministerio de Defensa durante la presidencia de Cristina Fernández. Hoy, se ha convertido una referente femenina del Gobierno del Frente de Todos.
«Inclusive en Suecia, donde yo estudié, la mayoría en estas profesiones son hombres. Eso se cambia con educación desde el nacimiento, la guardería y la escuela primaria. Son procesos lentos y me parece importanteque una vaya ocupando estos espacios a la vez que el Estado realmente ponga esfuerzos para que la mujer pueda incorporarse a los procesos productivos», dijo.
Fuente: SputNikNews