El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, señaló este miércoles por graves violaciones de derechos humanos a los Gobiernos de Cuba, Venezuela, Irán y China en su informe anual, en el que volvió a evitar la expresión “territorios ocupados” para referirse a Cisjordania y Gaza.
“Rezamos por el día en el que los cubanos, venezolanos, chinos e iraníes y el resto del mundo pueda hablar libremente sin temer a sus propios Gobiernos”, manifestó Pompeo en declaraciones a la prensa.
El informe anual sobre Derechos Humanos del Departamento de Estado, publicado hoy y relativo a 2019, sirve de guía al Congreso estadounidense a la hora de determinar la ayuda exterior que se concede a cada país.
EL NOMBRE DE JOSÉ DANIEL FERRER APARECE 17 VECES
Con respecto a Cuba, específicamente, EE.UU. condenó la existencia de “presos políticos” y puso de ejemplo el caso del disidente José Daniel Ferrer, líder del grupo disidente Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), que está preso desde octubre pasado por una supuesta agresión a otro hombre, un cargo que sus allegados niegan.
“El nombre de José Daniel Ferrer aparece 17 veces en este informe. Él es uno de los miles de presos políticos que durante años han sido arrastrados, encadenados y golpeados a manos del régimen. Mañana será sentenciado por una corte cubana”, dijo Pompeo, que consideró que los cargos en su contra son “falsos”.
Además, en el documento, el Departamento de Estado acusó al Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, al que se refiere como “antiguo régimen”, de “significativas” violaciones a los derechos humanos, como ejecuciones extrajudiciales y torturas por parte de las fuerzas de seguridad.
Como ya ha dicho anteriormente, EE.UU. consideró que el apoyo de “cientos” de agentes de las fuerzas de seguridad cubana ha permitido a Maduro mantenerse en el poder y ha impedido que sea sustituido por el líder opositor Juan Guaidó, considerado como presidente interino por medio centenar de naciones.
EL APARATO DE VIGILANCIA ESTATAL CHINO
En una rueda de prensa, Pompeo criticó el uso por parte del Estado chino de técnicas destinadas a “vigilar a los disidentes políticos” y que van desde el reconocimiento facial hasta el uso de aplicaciones móviles.
En el informe, EE.UU. denunció que las autoridades de la región noroccidental china de Xinjiang han “expandido” los “campos de reeducación” para miembros de minorías musulmanas como los uigures y kazajos.
“Medios internacionales, organizaciones de derechos humanos y personas que han sido detenidas en esos campos aseguran que las fuerzas de seguridad cometieron abusos, torturas y asesinatos”, recoge el informe, cuyos señalamientos pueden provocar una reacción de Pekín, como ha ocurrido en similares ocasiones.
LOS “ABUSOS” SON PARTE DE LA “POLÍTICA” DE IRÁN
Respecto a Irán, EE.UU. formula una fuerte acusación: asegura que “muchos” de los abusos a los derechos humanos fueron “perpetrados como parte de la política gubernamental” y, por ello, no se han tomado “pasos efectivos” para investigar, enjuiciar y castigar a los “funcionarios” que los cometieron.
“Esto -añade el informe- incluye abusos y numerosas muertes en custodia durante los últimos años. La impunidad siguió siendo generalizada en todos los niveles del gobierno y las fuerzas de seguridad”.
EE.UU. NO USA “TERRITORIOS OCUPADOS” PARA HABLAR DE CISJORDANIA Y GAZA
En cuanto a Israel, el informe sigue sin usar la expresión “territorios ocupados” para referirse a Cisjordania y Gaza, algo que dejó de hacer en 2018; y subraya que las fronteras de Jerusalén deben decidirse en “negociaciones entre las partes”, un proceso para el que EE.UU. ha presentado un plan que los palestinos rechazan.
El texto cita los asesinatos y detenciones arbitrarias como los principales abusos cometidos tanto por autoridades israelíes como por las palestinas, además de las “restricciones significativas a la libertad de movimiento” impuestas por Israel y la “violencia” y el “trabajo infantil forzado” por parte del movimiento Hamás en Gaza.
El documento examina el comportamiento de los gobiernos de todo el mundo respecto a los derechos humanos, aunque no el de EE.UU., donde grupos como Amnistía Internacional (AI) han denunciado un aumento de las violaciones a los derechos de minorías y migrantes desde que el presidente Donald Trump asumió el poder en 2017.
Fuente: El Carabobeño