Petróleos Mexicanos (Pemex) presumió a inversionistas un paquete de medidas para contrarrestar el desplome de precios del petróleo, dos semanas después de que las calificadoras Moody’s y Fitch degradaron su nota crediticia.
El conjunto de medidas suman 113,040 millones de pesos (mdp) con el “objeto de mitigar los efectos de la baja temporal de los precios del petróleo en los mercados internacionales, sobre el balance financiero y sobre la generación de flujo de efectivo de la empresa”, expresó la compañía en una carta firmada por su director general, Octavio Romero Oropeza, y el director de finanzas, Alberto Velázquez García, vista por Forbes México.
La empresa petrolera más endeudada del mundo comentó que informó a las agencias de riesgo crediticio una reducción por 40,500 millones de pesos en su presupuesto de inversión para 2020.
Pemex destacó un recorte de impuestos por 65,000 millones de pesos, mediante la reducción del Derecho de Utilidad Compartida (DUC) de 58% a 54%, que oficializó el gobierno mexicano, el pasado 21 de abril en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La empresa también mencionó un ingreso adicional por 7,540 millones de pesos (mdp) por la cobertura petrolera contratada a finales del año pasado, independiente a la de Hacienda.
Según Pemex, la reducción de calificaciones no se atribuye a la toma de decisiones operativas y financieras de Romero Oropeza, sino a las repercusiones, que en opinión de dichas agencias se tendrán en el contexto de una crisis severa de salud a nivel mundial ocasionada por la pandemia del Covid-19.
La semanda pasada, el precio de la mezcla mexicana de exportación se hundió a su peor nivel en su historia, registrando números negativos de -2.32 dólares por cada barril de petróleo.
“Es importante enfatiza que, tomando en cuenta la naturaleza de los factores que han incidido en los bajos niveles del precio del crudo, es factible esperar que el paulatino regreso de las actividades económicas habrá de ser el elemento central de la recuperación del mercado petrolero en el corto plazo”, precisó la empresa en el documento.
Pemex arrastra una deuda financiera de 105,000 millones de dólares mientras intenta estabilizar su producción petrolera hacia un nivel de 2.6 millones de barriles diarios al final del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hoy la deuda financiera de Pemex está en grado especulativo por Moody’s y Fitch, el término formal para los bonos ‘basura’. Solo S&P mantiene su nota con grado de inversión.
Fuente: Forbes México