A través de una carta a los argentinos, Mauricio Macri aclaró que «es falsa la versión» que dio el presidente Alberto Fernández sobre que le había recomendado durante una conversación telefónica no decretar una cuarentena por el coronavirus y “que se mueran los que tengan que morirse”.
En el texto, publicado en las redes sociales y titulado «El valor de la palabra presidencial», Macri dijo que en la charla telefónica le mostró su «apoyo en un momento de decisiones difíciles para el país y para todo el mundo».
«Quiero recordarle al Presidente que nada es más importante para un dirigente político –y sobre todo para un presidente– que su palabra. La credibilidad de la palabra presidencial debe ser cuidada como un tesoro», manifestó.
Desde Zurich, adonde llegó luego de cumplir cuarentena en Francia para ocupar su oficina como titular de Fundación FIFA, el ex mandatario se mostró «dispuesto» a hacer su «aporte desde el lugar que sea» en la búsqueda de «consensos amplios y generosos».
No obstante, aclaró que para progresar en esa línea se necesitan «dirigentes creíbles» y que «los interlocutores puedan confiar en la palabra del otro».
Y si bien manifestó que durante estos meses hizo «pocas declaraciones públicas por respeto al nuevo gobierno», remarcó: «Me veo obligado a aclarar la verdad de aquella conversación, porque valoro mi palabra«.
La respuesta del líder del PRO llegó tras las polémicas declaraciones del presidente sobre la conversación que mantuvieron un día después de haber decretado el aislamiento obligatorio por la pandemia.
«Al día siguiente que decreté la cuarentena, él (por Mauricio Macri) me llamó y me recomendó que no hagamos cuarentena, que dejemos a toda la gente en la calle y que murieran los que tuvieran que morirse», aseguró el jefe de Estado.
En esa misma nota radial, Fernández también aseguró que «a la Argentina le fue mejor con el coronavirus que con el gobierno de Mauricio Macri».
El ex mandatario se había pronunciado también el 18 de agosto pasado luego del banderazo en todo el país contra la extensión de la cuarentena y la reforma judicial, entre otras consignas.
Junto a su esposa Juliana Awada y Antonia, hija de ambos, Macri viajó el 30 de julio a Francia, lo que le valió duras críticas del Gobierno y de otros dirigentes del oficialismo.
Estuvieron instalados en París y luego en la Costa Azul .Después se dirigieron a la capital suiza por segunda vez desde que asumió al frente de la Fundación FIFA, puesto que le fue concedido en enero pasado por el actual jefe de la FIFA, el suizo Gianni Infantino.
Pese a estar en Europa abocado a su tarea en la FIFA, tampoco pierde de vista su agenda política. Días atrás, mantuvo una reunión vía Zoom con los referentes de Juntos por el Cambio en medio de las protestas por la reforma judicial impulsada por el Gobierno nacional.
La carta completa de Macri
Es cierto que hablé con el presidente Fernández el 19 de marzo, antes del anuncio del aislamiento social y obligatorio. Lo llamé yo, para ponerme a su disposición y mostrarle mi apoyo en un momento de decisiones difíciles para el país y para todo el mundo.
Es falsa la versión que el Presidente ha dado sobre nuestra conversación. De ninguna manera dije las cosas que ha relatado en estos días.
Quiero recordarle al Presidente que nada es más importante para un dirigente político –y sobre todo para un presidente– que su palabra. La credibilidad de la palabra presidencial debe ser cuidada como un tesoro.
La Argentina necesita consensos amplios y generosos para solucionar los problemas que acarrea desde hace décadas. Sobre todo después de la pandemia y la cuarentena, que los han vuelto más profundos y más visibles. Estoy dispuesto a hacer mi aporte, desde el lugar que sea, para avanzar en esta dirección.
Pero un primer requisito para progresar en estos consensos es que los dirigentes sean creíbles, que los interlocutores puedan confiar en la palabra del otro. Sin confianza es imposible llegar a acuerdos.
En estos meses decidí hacer pocas declaraciones públicas, por respeto al nuevo gobierno y para darle tiempo a asentarse. Hoy, sin embargo, me veo obligado a aclarar la verdad de aquella conversación, porque valoro mi palabra. Siempre les dije la verdad a los argentinos, en los momentos buenos y en los momentos malos, y pienso continuar de la misma manera.
Fuente: El Clarín