Seis aspirantes presidenciales están encarcelados, otro decidió exiliarse, mientras otra precandidata está en la mira del régimen, fue citada a través del Ministerio Público, pero no acudió, la policía esta tras su pista. Con ese escenario se enfrenta la oposición a las elecciones, aunque hasta ahora no presenta candidato.
El periodo para la postulación de candidatos ante el Consejo Supremo Electoral (CSE) es entre el 28 de julio al 2 de agosto. El único partido de oposición Ciudadanos por la Libertad (CxL), que integra la Alianza Ciudadanos por la Libertad (ACxL) aún no tiene candidato debido a los obstáculos que les ha impuesto el régimen, explicó a los medios de comunicación la presidenta de CxL, Kitty Monterrey.
Monterrey anunció que su partido elegirá al candidato entre los dos aspirantes con que cuenta: Américo Treminio y Noel Vidaurre. Añadió que la selección del candidato estará definida la próxima semana.
Los seis aspirantes de la oposición que están presos son: Cristiana Chamorro, a quien el régimen acusa de presunto “lavado de dinero”; mientras que a los aspirantes Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, Miguel Mora y Medardo Mairena, les acusa de «traición a la patria» por denunciar los vejámenes y violaciones de derechos humanos que comete la dictadura encabezada por Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ante los obstáculos impuestos por Ortega que ha dejado prácticamente a la oposición con escasas opciones, la académica María Asunción Moreno anunció su precandidatura presidencial por la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), para competir en la selección interna de ACxL.
Horas más tarde a ese anuncio, el Ministerio Público la citó para una “entrevista” el lunes 12 de julio, sin especificar las razones. Moreno no acudió a la “cita”, la policía la busca, patrullas de ese organismo vigilan su residencia en Managua y hasta ahora se desconoce el paradero de la aspirante.
Una de las prácticas adoptadas por el régimen ha sido encarcelar a los precandidatos después de citarlos.
“Una vez más los miembros de la Alianza Cívica continúan siendo objeto de represión y persecución política hacia ciudadanos con vocación democrática y deseos de cambios en el país”, denunció la ACJD en un comunicado. La organización dijo que mantiene la precandidatura presidencial de Moreno.
Exilio
Mientras, el exjefe de la “Contra” Luis Fley renunció a su precandidatura presidencial y decidió exiliarse el lunes 12 de julio, debido a las presiones y a la vigilancia que el régimen mantenía sobre su casa. Hoy sostiene que ir a elecciones es “apoyar” al régimen de Ortega.
“Me retiro, no hay condiciones para participar en el proceso electoral, hacerlo sería convertirme en colaborador de la dictadura y avalar estas elecciones de Ortega”, dijo el exjefe “contra” que combatió a Ortega durante la primera dictadura sandinista.
Fley que antes manifestó no saldría al exilio debido a su edad, dijo que no tuvo opción y que se vio obligado debido a las presiones del régimen. “Me vi obligado a salir al exilio, la presión se volvió difícil y tuve que salir por puntos ciegos” del país.
El excontra asegura que Ortega no va a liberar a los presos políticos antes de las elecciones del 7 de noviembre, entre ellos a los seis aspirantes presidenciales. Cree que, de suceder, podría liberarlos hasta el 3 de agosto, un día después que vence el término de inscripciones, aunque lo considera una posibilidad remota.
Y aunque Fley era un precandidato presidencial hasta hace poco, hoy asegura no creer que Ortega abandone el poder a través de elecciones como ocurrió en 1990 cuando fue derrotado en las urnas por Violeta Barrios de Chamorro.
“Difícil. La lucha cívica fue neutralizada por la dictadura, no hay espacios para expresar libremente y si lo hacemos estamos expuestos a ser encarcelados y acusados, tenemos que medir nuestras palabras”, dijo en relación a las Leyes que ha creado el régimen para enjuiciar y condenar a la cárcel a opositores.
Noel Vidaurre
El aspirante presidencial Noel Vidaurre es un abogado, exdiputado y excandidato presidencial que cree que hay que darle la pelea a Ortega en el escenario electoral pese a las adversidades y los obstáculos que impone el régimen con el propósito de mantenerse en el poder.
“Quisiéramos que hubiese condiciones como se dan en los países con estándares de democracia, pero desafortunadamente no es así. ¿La gran pregunta es si queremos salir de Ortega y del Frente Sandinista o no? Si queremos salir de Ortega y del Frente Sandinista y que se vayan del poder significa que debemos ir a las elecciones bajo las reglas que hay. Tenemos que salir a votar los nicaragüenses y si salimos a votar todos los nicaragüenses, no hay manera de que Daniel Ortega se la pueda robar, no puede hacer fraude con esa magnitud de votos y vamos a derrotarlo y por supuesto el país va a cambiar”, acotó.
“Si no queremos salir de él [Ortega] no vayamos a las elecciones y Ortega las va a ganar porque los sandinistas salen a votar disciplinadamente en la mañana. Si no salimos a votar los demócratas, los que queremos un cambio verdadero, los que estamos cansados de la dictadura y de la opresión, los que queremos una Nicaragua distinta, institucionalizada con libertad, educación y trabajo, cómo esperamos ganar y salir de Daniel Ortega y del FSLN”, cuestionó.
Ortega tiene control de las instituciones del Estado, incluido el poder electoral, el Ejército y la Policía que se han convertido en instituciones al servicio de una familia en el poder, los Ortega-Murillo.
El aspirante presidencial sostiene que se le puede ganar a Ortega aun en medio de las condiciones adversas. “Sí lo podemos derrotar, ya sucedió en 1990 que también las condiciones eran adversas y el Ejército era de 250.000 hombres en armas y el Consejo Supremo Electoral era controlado por Ortega y todas las instituciones y empresas del Estado estaban en manos de Ortega, aquí no había libertad en 1990 y fuimos a las elecciones bajo las mismas condiciones de Ortega y ganamos ¿por qué no podemos hacerlo ahora?
Fuente: Diario las Américas
Los seis aspirantes de la oposición que están presos son: Cristiana Chamorro, a quien el régimen acusa de presunto “lavado de dinero”; mientras que a los aspirantes Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, Miguel Mora y Medardo Mairena, les acusa de «traición a la patria» por denunciar los vejámenes y violaciones de derechos humanos que comete la dictadura encabezada por Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Ante los obstáculos impuestos por Ortega que ha dejado prácticamente a la oposición con escasas opciones, la académica María Asunción Moreno anunció su precandidatura presidencial por la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), para competir en la selección interna de ACxL.
Horas más tarde a ese anuncio, el Ministerio Público la citó para una “entrevista” el lunes 12 de julio, sin especificar las razones. Moreno no acudió a la “cita”, la policía la busca, patrullas de ese organismo vigilan su residencia en Managua y hasta ahora se desconoce el paradero de la aspirante.
Una de las prácticas adoptadas por el régimen ha sido encarcelar a los precandidatos después de citarlos.
“Una vez más los miembros de la Alianza Cívica continúan siendo objeto de represión y persecución política hacia ciudadanos con vocación democrática y deseos de cambios en el país”, denunció la ACJD en un comunicado. La organización dijo que mantiene la precandidatura presidencial de Moreno.
Exilio
Mientras, el exjefe de la “Contra” Luis Fley renunció a su precandidatura presidencial y decidió exiliarse el lunes 12 de julio, debido a las presiones y a la vigilancia que el régimen mantenía sobre su casa. Hoy sostiene que ir a elecciones es “apoyar” al régimen de Ortega.
“Me retiro, no hay condiciones para participar en el proceso electoral, hacerlo sería convertirme en colaborador de la dictadura y avalar estas elecciones de Ortega”, dijo el exjefe “contra” que combatió a Ortega durante la primera dictadura sandinista.
Fley que antes manifestó no saldría al exilio debido a su edad, dijo que no tuvo opción y que se vio obligado debido a las presiones del régimen. “Me vi obligado a salir al exilio, la presión se volvió difícil y tuve que salir por puntos ciegos” del país.
El excontra asegura que Ortega no va a liberar a los presos políticos antes de las elecciones del 7 de noviembre, entre ellos a los seis aspirantes presidenciales. Cree que, de suceder, podría liberarlos hasta el 3 de agosto, un día después que vence el término de inscripciones, aunque lo considera una posibilidad remota.
Y aunque Fley era un precandidato presidencial hasta hace poco, hoy asegura no creer que Ortega abandone el poder a través de elecciones como ocurrió en 1990 cuando fue derrotado en las urnas por Violeta Barrios de Chamorro.
“Difícil. La lucha cívica fue neutralizada por la dictadura, no hay espacios para expresar libremente y si lo hacemos estamos expuestos a ser encarcelados y acusados, tenemos que medir nuestras palabras”, dijo en relación a las Leyes que ha creado el régimen para enjuiciar y condenar a la cárcel a opositores.
Noel Vidaurre
El aspirante presidencial Noel Vidaurre es un abogado, exdiputado y excandidato presidencial que cree que hay que darle la pelea a Ortega en el escenario electoral pese a las adversidades y los obstáculos que impone el régimen con el propósito de mantenerse en el poder.
“Quisiéramos que hubiese condiciones como se dan en los países con estándares de democracia, pero desafortunadamente no es así. ¿La gran pregunta es si queremos salir de Ortega y del Frente Sandinista o no? Si queremos salir de Ortega y del Frente Sandinista y que se vayan del poder significa que debemos ir a las elecciones bajo las reglas que hay. Tenemos que salir a votar los nicaragüenses y si salimos a votar todos los nicaragüenses, no hay manera de que Daniel Ortega se la pueda robar, no puede hacer fraude con esa magnitud de votos y vamos a derrotarlo y por supuesto el país va a cambiar”, acotó.
“Si no queremos salir de él [Ortega] no vayamos a las elecciones y Ortega las va a ganar porque los sandinistas salen a votar disciplinadamente en la mañana. Si no salimos a votar los demócratas, los que queremos un cambio verdadero, los que estamos cansados de la dictadura y de la opresión, los que queremos una Nicaragua distinta, institucionalizada con libertad, educación y trabajo, cómo esperamos ganar y salir de Daniel Ortega y del FSLN”, cuestionó.
Ortega tiene control de las instituciones del Estado, incluido el poder electoral, el Ejército y la Policía que se han convertido en instituciones al servicio de una familia en el poder, los Ortega-Murillo.
El aspirante presidencial sostiene que se le puede ganar a Ortega aun en medio de las condiciones adversas. “Sí lo podemos derrotar, ya sucedió en 1990 que también las condiciones eran adversas y el Ejército era de 250.000 hombres en armas y el Consejo Supremo Electoral era controlado por Ortega y todas las instituciones y empresas del Estado estaban en manos de Ortega, aquí no había libertad en 1990 y fuimos a las elecciones bajo las mismas condiciones de Ortega y ganamos ¿por qué no podemos hacerlo ahora?
Fuente: Diario las Américas