El nombramiento del primer Ejecutivo del presidente Pedro Castillo en Perú ha dejado en claro que el maestro rural apuesta mucho por la izquierda, muy poco por las mujeres y deja una enorme incertidumbre en el lado económico.
Los nombramientos, polémicos y duramente criticados, ubican a Castillo más cerca de la izquierda radical que defiende el partido Perú Libre que de la moderación que exhibió en la campaña electoral, con un equipo más confrontacional que conciliador y más orientado a contentar a los diferentes sectores de la izquierda que a unir a un país radicalmente fragmentado y polarizado.
Fuente: EFE