El referendo celebrado este domingo (01.08.2021) en México para decidir si se investiga y enjuicia a cinco expresidentes por corrupción contó con una participación de alrededor de 7%, muy lejos del 40% necesario para que tenga efectos legales, según un conteo rápido oficial.
La proyección del Instituto Nacional Electoral (INE) señala que en la consulta, impulsada por el presidente izquierdista Andrés Manuel López Obrador, participaron entre 7,07% y 7,74% de los 93,6 millones de electores.
El «sí» a la posibilidad de procesar a los exmandatarios tuvo un respaldo de entre 89,36% y 96,28%; el «no» registró un apoyo que oscila entre 1,38% y 1,58%, de acuerdo con la estimación presentada por el presidente del INE, Lorenzo Córdova.
Los resultados definitivos se conocerán este lunes y serán «remitidos a la Suprema Corte de Justicia para que determine los efectos legales», dijo Córdova en una sesión pública del INE.
Para que el referéndum fuera vinculante se requerían los votos de 37,4 millones de personas (40% del padrón electoral).
Empero, la posibilidad de que la fiscalía actúe sigue en pie, pues en México los exgobernantes pueden ser juzgados como cualquier ciudadano ya que pierden el fuero al dejar el poder.
Varios expresidentes en la mira
El ejercicio, cuyas consecuencias son inciertas, dividió a los mexicanos entre los que creen que se puede acabar con la histórica impunidad en el país y los que consideran absurdo votar para que se aplique la ley, pues la Fiscalía debería emprender acciones directamente si tiene pruebas contra los exmandatarios.
En un principio, se proponía enjuiciar a los expresidentes Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), Ernesto Zedillo (1994-2000), Vicente Fox (2000-2006), Felipe Calderón (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018) por corrupción, fraudes electorales y la guerra contra el narcotráfico, entre otros males.
Pero la Suprema Corte modificó la pregunta para preservar la presunción de inocencia y dejó un enunciado muy abierto que plantea a los mexicanos si quieren «emprender un proceso de esclarecimiento de las decisiones políticas tomadas en los años pasados».
A pesar de haber convocado y promovido el plebiscito, el presidente López Obrador, de gira fuera de la capital, no fue a votar porque, tal y como ya había avisado, su «fuerte no es la venganza».
Fuente: DW