El líder republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, y otros políticos del partido acusaron el jueves al presidente Joe Biden de no hacer más para ayudar a los cubanos a tener acceso a internet.
El servicio de internet fue suspendido durante las protestas contra la dictadura comunista que iniciaron el 11 de julio. El régimen cubano no ha reconocido explícitamente que ellos fueron los responsables de las protestas de una población cansada por la escasez, el hambre y que demanda libertad. Más de tres semanas después, el servicio de internet sigue siendo irregular en la nación caribeña.
McCarthy se reunió en Miami el jueves con miembros de la delegación de congresistas cubano-estadounidenses del estado, con el gobernador republicano Ron DeSantis y la vicegobernadora Jeanette Nuñez.
En una conferencia de prensa posterior a la reunión, la representante Maria Elvira Salazar dijo que, aunque algunas compañías específicas habían manifestado su disposición a intervenir y ayudar, la Casa Blanca ha ignorado a la delegación cubano-estadounidense. “La paciencia se está agotando”, señaló.
Biden ha dicho que el gobierno está trabajando para «identificar opciones» con el fin de hacer que el internet en la isla sea más accesible. El acceso a la red mundial en Cuba ha sido costoso y relativamente escaso hasta hace poco. El régimen cubano restringe a los medios de comunicación independientes y censura lo que está disponible en línea. También suspende el acceso a internet si así lo desea.
El viernes pasado, Biden anunció nuevas sanciones contra la Policía Nacional Revolucionaria de Cuba y sus dos principales funcionarios, aunque esas medidas son consideradas irrelevantes porque la administración de Donald Trump sancionó a la matriz, el Ministerio del Interior (Minint).
El presidente también creó un grupo de trabajo para revisar la política de remesas de Estados Unidos con el fin de garantizar que la dictadura somunista no esté llevándose una tajada del dinero que los cubanos mandan desde territorio estadounidense a la isla.
El gobierno del expresidente Donald Trump emprendió más de 200 acciones contra Cuba, incluido limitar la cantidad de viajes individuales hacia la isla desde Estados Unidos, prohibir las visitas de cruceros y poner un tope a las remesas. Los republicanos reunidos en Miami dijeron el jueves que estaban en contra de retirar dicho tope.
El representante Mario Diaz-Balart dijo que incrementar las remesas es “algo que el régimen ha estado pidiendo”.
Diaz-Balart añadió que había participado en sesiones informativas secretas previas durante las cuales se habían presentado varias opciones para mejorar el acceso a internet. Señaló que no podía divulgar ningún detalle, pero que esas medidas se habían utilizado en otros países.
Los cubanos usaron el internet para propagar en las redes sociales las noticias sobre las manifestaciones contra el régimen del mes pasado. Miles de personas salieron a las calles de La Habana y de otras ciudades para oponerse a las políticas gubernamentales en enormes protestas, algo que no se había visto en la isla en décadas.
“Recuerden por qué quieren hacer esto”, dijo McCarthy con relación a mejorar y mantener el acceso a internet para los habitantes de la isla. “Ustedes quieren que los individuos, esos que están en Cuba anhelando libertad, entiendan que estamos con ellos”.
Fuente: Diario las Américas
En una conferencia de prensa posterior a la reunión, la representante Maria Elvira Salazar dijo que, aunque algunas compañías específicas habían manifestado su disposición a intervenir y ayudar, la Casa Blanca ha ignorado a la delegación cubano-estadounidense. “La paciencia se está agotando”, señaló.
Biden ha dicho que el gobierno está trabajando para «identificar opciones» con el fin de hacer que el internet en la isla sea más accesible. El acceso a la red mundial en Cuba ha sido costoso y relativamente escaso hasta hace poco. El régimen cubano restringe a los medios de comunicación independientes y censura lo que está disponible en línea. También suspende el acceso a internet si así lo desea.
El viernes pasado, Biden anunció nuevas sanciones contra la Policía Nacional Revolucionaria de Cuba y sus dos principales funcionarios, aunque esas medidas son consideradas irrelevantes porque la administración de Donald Trump sancionó a la matriz, el Ministerio del Interior (Minint).
El presidente también creó un grupo de trabajo para revisar la política de remesas de Estados Unidos con el fin de garantizar que la dictadura somunista no esté llevándose una tajada del dinero que los cubanos mandan desde territorio estadounidense a la isla.
El gobierno del expresidente Donald Trump emprendió más de 200 acciones contra Cuba, incluido limitar la cantidad de viajes individuales hacia la isla desde Estados Unidos, prohibir las visitas de cruceros y poner un tope a las remesas. Los republicanos reunidos en Miami dijeron el jueves que estaban en contra de retirar dicho tope.
El representante Mario Diaz-Balart dijo que incrementar las remesas es “algo que el régimen ha estado pidiendo”.
Diaz-Balart añadió que había participado en sesiones informativas secretas previas durante las cuales se habían presentado varias opciones para mejorar el acceso a internet. Señaló que no podía divulgar ningún detalle, pero que esas medidas se habían utilizado en otros países.
Los cubanos usaron el internet para propagar en las redes sociales las noticias sobre las manifestaciones contra el régimen del mes pasado. Miles de personas salieron a las calles de La Habana y de otras ciudades para oponerse a las políticas gubernamentales en enormes protestas, algo que no se había visto en la isla en décadas.
“Recuerden por qué quieren hacer esto”, dijo McCarthy con relación a mejorar y mantener el acceso a internet para los habitantes de la isla. “Ustedes quieren que los individuos, esos que están en Cuba anhelando libertad, entiendan que estamos con ellos”.
Fuente: Diario las Américas