Austin, un general retirado de cuatro estrellas que estuvo al mando de tropas en Afganistán, ofreció su primera conferencia de prensa en el Pentágono desde que el Talibán tomó control de Kabul el domingo.
Aseguró que principalmente está enfocado en el aeropuerto, el cual enfrenta “varias amenazas” que deben ser monitoreadas.
“No podemos darnos el lujo de no defender ese aeródromo o de no tener un aeropuerto seguro, al que cientos o miles de civiles pueden acceder”, aseguró. Añadió que continúan las negociaciones con el Talibán para garantizar el paso seguro de los evacuados.
Austin señaló que hay unos 4.500 elementos estadounidenses en el aeropuerto, manteniendo la seguridad para permitir la operación de evacuación coordinada por el Departamento de Estado, la cual se ha visto envuelta en el caos y la confusión. Aseguró que el Departamento de Estado enviaría agentes consulares adicionales para acelerar los procesos de evacuación.
“No estamos cerca de donde queremos estar” en cuanto a la velocidad de las evacuaciones, dijo Austin.
Altos funcionarios militares de Estados Unidos están hablando con comandantes del Talibán en Kabul acerca de los retenes y toques de queda que han limitado el número de estadounidenses y afganos que han podido ingresar al aeropuerto. Entre dichos funcionarios se encuentra Peter Vasely, contraalmirante de la Armada, dijo John Kirby, principal portavoz del Pentágono.
En un periodo de 24 horas, unas 2.000 personas, entre ellas 325 ciudadanos estadounidenses, han podido salir de Afganistán en 18 vuelos de los aviones de transporte C-17 de la Fuerza Aérea, comentó Kirby. El número de vuelos de salida sería similar en las próximas 24 horas, añadió el vocero, aunque recalcó que no puede calcular a cuántas personas llevarían.
Fuente: Diario las Américas