El viernes pasado, la AIE acordó aumentar la cantidad de petróleo que llega al mercado mundial. Se suma a los 62,7 millones de barriles que los miembros de la agencia declararon que liberarían el mes pasado para mitigar la escasez.
Estas medidas demuestran “la determinación de los países miembros de proteger la economía mundial de las repercusiones sociales y económicas de una crisis petrolera tras la agresión de Rusia contra Ucrania”, declaró el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol. “Los acontecimientos en Ucrania son cada día más angustiosos, y es necesario que la AIE actúe en este momento para aliviar ciertas tensiones en los mercados energéticos”.
La demanda de energía aumentó a medida que la economía mundial se recuperaba de la pandemia de COVID-19, superando la oferta y haciendo subir los precios.
Los precios altos de la energía impulsaron la inflación en todo el mundo, y la guerra en Ucrania exacerbó el problema en medio de la incertidumbre sobre el suministro de petróleo y gas natural de Rusia y las sanciones occidentales a Moscú.
Rusia es el tercer productor mundial de petróleo, y cerca del 60% de sus exportaciones van a Europa y el 20% a China.
Los países miembros de la AIE tienen 1.500 millones de barriles en reservas públicas.
Fuente: Diario las Américas