El peso argentino, que en su lanzamiento en 1991 valía lo mismo que un dólar, hoy ha tocado su piso histórico. Por estas horas en la city porteña, hacen falta 300 pesos para comprar un “verde”. En varias provincias corrió el pánico y, mientras en Buenos Aires la divisa norteamericana cotizaba 300 o 301, en el interior superaba los 305.
Aunque se vean leves retracciones en la cotización en las próximas horas, la tendencia pareciera ser alcista, sin nada en el horizonte que permita imaginar un escenario diferente. Hasta el momento, la gestión de Silvina Batakis al frente del ministerio de Economía no ha mostrado nada diferente a lo que venía ocurriendo con su predecesor. Sin embargo, la etapa actual de “guzmanismo sin Martín Guzmán”, pareciera ser mucho más delicada, ya que de a poco el miedo y la incertidumbre vienen creciendo a pasos agigantados.
Tanto Cristina Kirchner como Alberto Fernández, que se horrorizaban por la situación económica en el final del gobierno de Mauricio Macri, hoy están en otra cosa. La vicepresidente, cada vez más encerrada en su complicado frente judicial, de lo único que habla es de su supuesto enfrentamiento con la Corte Suprema de Justicia. Mientras tanto, el presidente, completamente resignado a ser un simple repetidor de la agenda de CFK, tampoco se manifiesta sobre el desastre económico de su gestión.
“He reflexionado sobre el mensaje que ayer difundió Cristina Kirchner. He visto que muchos eligen criticar las formas para evitar el verdadero problema que enfrentamos: nuestra justicia está deslegitimada y necesita, de manera urgente, una reforma profunda y democrática”, señaló el mandatario desde su cuenta de Twitter.
¿Qué dijo CFK ayer? Que su sentencia ya está «escrita y firmada». Claro que ella considera que esto no es más que una persecución política, a pesar de que no pueda justificar su inocencia. Y aunque tenga a su equipo de abogados en las causas, el que la defiende públicamente (que también tiene título habilitante) es el mismo presidente, al que ya logró doblegar por completo en la interna del Frente de Todos.
“La vicepresidenta ha afirmado que en una causa en la que se la enjuicia y en la que el fiscal aún no ha formulado su acusación, su sentencia ya está escrita. Esa afirmación pone en crisis la objetividad del sistema de justicia y la idoneidad moral de los miembros del tribunal”, decía Alberto Fernández, mientras el dólar cruzaba la barrera histórica hoy. La disociación del oficialismo con respecto a la realidad es total. Mientras la economía se incendia, lo único relevante parece ser el frente judicial de la vicepresidente.
Ante este panorama, el que piense que el dólar puede estar más cerca de volver a los 250 que de saltar a 400, está mirando evidentemente otro canal o no tiene la más pálida idea de la repetida historia argentina.
Por ahora, Batakis dice que no piensa devaluar, haciendo referencia al dólar oficial, que sigue anclado por debajo de los 140. Mientras continue creciendo la brecha, las distorsiones en la economía argentina crecerán en simultáneo, haciendo más complicado aún el escenario del día después que se sincere la economía.
Fuente: Panam Post.