BOGOTÁ.- Los ricos se han convertido en el primer blanco para Gustavo Petro quien, a pocas horas de haber asumido el poder en Colombia, propuso subir los impuestos como parte de un ambicioso proyecto de reforma fiscal, con el que espera financiar los programas sociales.
El gobierno de Petro espera recaudar ingresos por 25 billones de pesos para el 2023, que equivalen a 5.760 millones de dólares.
Se trata de una reforma más ambiciosa que la que sacó adelante en 2021 el gobierno de expresidente Iván Duque (2018-2022) quien tuvo que cambiar por completo su propuesta inicial luego de multitudinarias manifestaciones y asonadas en contra de una mayor recaudación de impuestos, protestas financiadas por grupos de izquierda y del ELN, que apoyaban a Petro en las elecciones, de acuerdo con investigaciones de las autoridades colombianas.
La víspera, Petro dijo en su discurso de toma de posesión, justificó la medida argumentando, según su juicio, que se trata de «un acto de solidaridad», en el que «quienes tienen más recursos pagarían más impuestos» mientras el Estado los dirige hacia los más vulnerables.
La reforma aumentará el recaudo de renta a las personas naturales. “Nuestro objetivo es que paguen las personas de más de 10 millones de ingresos mensuales (2.300 dólares) que son el 2% de la población de más altos ingresos”, detalló a la prensa el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo.
Además, propone revivir el impuesto al patrimonio o a la riqueza para quienes tengan patrimonios superiores a 3.000 millones pesos, lo que equivale a unos 461.000 dólares.
La medida ha creado descontentos en los empresarios que generan empleos y riqueza, lo que podría crear fuga de inversiones y capitales al exterior.
Fuente: Diario las Américas.