MIAMI.- Los conservadores italianos se impusieron en las urnas y dieron la victoria a Giorgia Meloni, la primera mujer en ganar unas elecciones generales en el país europeo, bajo la fuerza de una coalición de varias agrupaciones que le otorgó el 51.5% de los votos.
De Italia sabemos que el país vive una duradera agitación política, que tiene su base en la variedad de partidos políticos y cambia de primer ministro cada año y medio.
Es probable que pasen varias semanas después de las elecciones del domingo 25 de septiembre antes de que Meloni, de brillantes ojos azules, sea nombrada oficialmente jefa del Gobierno.
Sea la inmigración o las persistentes dificultades de la economía, en medio del temor de una recesión tras el paso de la pandemia de coronavirus y la creciente crisis energética en Europa, Italia trata de mantenerse a flote.
“Soy Giorgia Meloni, soy mujer, soy madre y es muy probable me convierta, a los 45 años, en la primera ministra de Italia. Y quiero saludar con buena paz a los que me consideran una fascista o a los que, incluso en el extranjero, ya tienen miedo de lo que voy a hacer”, escribió en su cuenta de Twitter.
Datos
Los datos biográficos de la elegida denotan que milita en el ala conservadora italiana desde los 15 años, cuando se inscribió en el Frente de la Juventud del Movimiento Social Italiano, el partido que fundaron en 1947 la élite de la República Social Italiana en el norte italiano, bajo la guía de Giorgio Almirante, exministro de Benito Mussolini.
Cuando la agrupación política se disolvió, tras la muerte de Almirante, Meloni formó parte de la Alianza Nacional de Gianfranco Fini, que fue un movimiento muy conservador que tacharon de “fascista tradicional”.
A los 29 años fue elegida por diputada y dos años después fue ministra de la Juventud en el gobierno de Silvio Berlusconi.
Fue entonces cuando Meloni dio instrucciones a las filiales de su partido de que no se hicieran más declaraciones extremas y, sobre todo, no utilizaran el “saludo romano”, con el brazo derecho extendido que es asociado al fascismo.
Más tarde, en 2012, cuando la Alianza Nacional perdió fuerza, la joven Meloni, a los 35 años, fundó Fratelli d’Italia (Hermanos de Italia), con fuertes ideas conservadoras.
Su ascenso fue creciendo paulatinamente desde las elecciones parlamentarias europeas de 2019, en las que Hermanos de Italia ganó el 6,4% de los votos.
A partir de entonces, ganó aún más espacio, sobre todo después de exigir que la Unión Europea, con Italia incluida, abandonara el pacto mundial sobre migración, que fue acordado en el seno de la Organización de Naciones Unidas, y defender un bloqueo naval en el mar Mediterráneo para frenar la inmigración.
Entretanto, el presidente de la República Italiana, Sergio Mattarella, que no gobierna como en otros países, pero sí representa la unidad nacional, más allá de tendencias políticas, aboga por agilizar el proceso de confirmación de Meloni.
Para ello, los grupos miembros de la coalición conservadora deben reconfirmar sus apoyos en sesión extraordinaria del pleno parlamentario, como indica la Constitución italiana.
Europa
A los países europeos le preocupa la tendencia conservadora de Meloni, dado su llamado a salvaguardar a Europa de las tendencias foráneas.
Para gobiernos europeos, como el español, dirigido por el socialista Pedro Sánchez, la elección de Meloni no parece ser buena noticia.
El presidente del Gobierno español demora en felicitar a la elegida en Italia, cuando rápidamente felicitó a presidentes electos como Gustavo Petro, en Colombia, o Emmanuel Macron, en Francia.
Por otra parte, el presidente del Partido Popular, en España, Alberto Núñez-Feijóo, espera que Meloni “rectifique sus planteamientos iniciales» en favor de «una Europa cohesionada», en alusión a sus declaraciones sobre temas de inmigración y otros asuntos socioculturales del Viejo Continente.
“Esto”, señaló, “sería mejor para los italianos y para los europeos».
No obstante, el partido liderado por Santiago Abascal, VOX, mantiene una relación próxima con Meloni, que además es presidenta del grupo de Reformistas y Conservadores (ERC) en el Parlamento Europeo al que pertenece la agrupación española.
«Giorgia Meloni ha mostrado el camino para una Europa orgullosa, libre y de naciones soberanas, capaces de cooperar para la seguridad y la prosperidad de todos», afirmó Abascal.
Medios europeos indican ‘preocupaciones’ con supuestas conexiones de Meloni con grupos de interés rusos cercanos a Vladimir Putin.
Sin embargo, los medios reconocen que la elegida no es admiradora del gobernante ruso. Por el contrario, desde la invasión de Ucrania, denunció firmemente la ocupación y mostró su apoyo al país agredido y la OTAN.