WASHINGTON- El principal asesor económico de la Casa Blanca , Brian Deese, anunció este jueves la renuncia de su cargo, según anunció la administración de Joe Biden.
Según Biden, «Brian tiene una capacidad única para convertir desafíos políticos complejos en acciones concretas que mejoran la vida de los estadounidenses».
La realidad en estos dos años ha demostrado todo lo contrario respecto a los elogios y la opinión del inquilino de la Casa Blanca sobre su asesor.
Deese deja el cargo con una economía envuelta en más incertidumbre que durante los peores picos de la pandemia de COVID-19 y con pronósticos aún más desalentadores para 2023, tras dos años que califican entre los peores para la economía estadounidense y el récord de inflación (9,1%) en las últimas cinco décadas.
Bantante poco hay que elogiar a la gestión del principal asesor de Biden, quien en opinión de republicanos debió renunciar en el 2021 y no ahora.
«Ha contribuido a convertir mi visión económica en realidad y ha gestionado la transición de nuestra recuperación económica histórica a un crecimiento constante y estable», dijo Biden.
La declaración del mandatario contrasta enormemente con el drama económico que sufren los estadounidenses desde su arribo a la Oficina Oval y demuestra una vez más la enajenación del Presidente acerca de la realidad económica y política adversa que ha causado en apenas la mitad de su mandato.
Brian Deese, de 44 años, deja el cargo a la mitad del mandato de Biden. Se desconoce quién lo sustituirá.