La Comisión Europea no toma decisiones claras para resolver los problemas más acuciantes. Uno de ellos es la necesidad de fijar una política de equidad con China porque nuestro sistema actual de compras que está totalmente desequilibrado.
Los resultados comerciales con los 10 principales países con los que la UE hace negocios (Estados Unidos, China, Reino Unido, Suiza, Rusia, Noruega, Turquía, Japón, Corea del Sur y la India) son alarmantes.
En noviembre de 2021, la UE vendía a estos 10 países 1,317 billones de euros, siendo Estados Unidos nuestro mayor cliente al que suministrábamos 363.900 millones de euros: Reino Unido con 259.500 millones. China era nuestro tercer cliente más importante con 203.900 millones, y Suiza el cuarto, con más 143,800 millones.
Un año después nuestras exportaciones crecen en 202.300 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 15,4%, siendo Estados Unidos –con un crecimiento del 28,4%– el país que más ha crecido en porcentaje. Le sigue Reino Unido, que incrementa las compras de la UE en 44.600 millones de euros, y Suiza, que lo hace en 28.600 millones.
Desde el punto de vista de las exportaciones en 2021, y a la misma fecha, los países miembros de la UE habían importado de estos 10 países 1,310 billones de euros que suponían un superávit de 7.100 millones de euros.
Los países de los que más importamos productos y servicios fueron China, que en el 2021 lo hicimos por valor de 423.200 millones; Estados Unidos, con 210.400 millones; Rusia, con 145.300 millones; Reino Unido, con 133.000 millones de euros; y Suiza, con 113.200 millones.
En aquellos momentos, teníamos un superávit con los Estados Unidos de 153.500 millones; con Reino Unido de 126.500 millones; y con Suiza de 30.600. Y un déficit ya muy importante con China de 219.300 millones; con Rusia de 63.800 millones; y con Noruega de 12.300 millones.
Pero mientras las exportaciones con estos 10 países crecían un 15,4%, las importaciones hicieron un 42,8%. Así, China llega a vender a los países de la UE 579.900 millones, subiendo sus ventas en 156.700 millones. Esa situación es la que nos ha llevado a que China siga siendo el país que más déficit genera a la UE.
En total, la Unión Europea tuvo hasta noviembre de 2022 un déficit acumulado de 351.100 millones de euros y empeoró su situación comercial con la mayoría de países menos con Suiza y con Japón.