El Consejo de Seguridad de la ONU no ha aprobado este lunes la iniciativa rusa respaldada por China para condenar e investigar el sabotaje de septiembre contra los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2, en el mar del Norte.
Tres países han votado a favor del texto, doce se han abstenido y ninguno ha votado en contra, por lo que la propuesta de resolución no ha cosechado los nueve apoyos necesarios para su aprobación, han destacado medios de comunicación rusos.
El documento calificaba de «amenaza para la paz y la estabilidad internacionales» estos «actos de sabotaje» y abogaba por una «investigación internacional eficaz, imparcial, transparente, minuciosa e inclusiva» para que todas las partes implicadas «rindan cuentas». Por ello instaba al secretario general de la ONU, António Guterres, a crear una comisión de expertos para investigar lo ocurrido.
Los gasoductos Nord Stream 1 y 2 son propiedad de la empresa estatal rusa Gazprom y unen Rusia con Alemania por el mar Báltico para suministrar gas natural al corazón de Europa. En 2021 Rusia suministró el 45 por ciento del gas natural a la Unión Europea, pero para noviembre de 2022 la cifra había caído al 13 por ciento tras la invasión rusa de Ucrania.
El representante estadounidense, Robert Wood, ha rechazado «categóricamente» las «acusaciones infundadas» de Moscú sobre una supuesta implicación estadounidense en estos ataques y ha acusado a Rusia de intentar desacreditar las investigaciones abiertas por Suecia o Dinamarca sobre lo ocurrido. Rusia «no busca la verdad», ha remachado.
Además, se ha preguntado por las «verdaderas intenciones» de Rusia al presentar a votación esta propuestas a sabiendas de que no contaba con los apoyos necesarios para su aprobación.
Entre el 26 y el 29 de septiembre se detectaron cuatro fugas en los gasoductos cerca de la isla danesa de Bornholm, aunque en aguas internacionales. La investigación danesa apunta a potentes explosiones como causantes y Suecia ha concluido que fue un «sabotaje evidente» tras hallar «residuos de explosivo».