MIAMI.- Donald Trump arribó al aeropuerto La Guardia, en Nueva York, procedente de West Palm Beach, en Florida, en su avión particular Boeing 757, el lunes a las 3.36 pm, para comparecer ante un juez por supuestos delitos penales relacionados con el pago para comprar el silencio de una actriz porno durante la campaña presidencial de 2016.
Está previsto que Trump, el primer expresidente estadounidense que enfrenta formalmente acusaciones, pase la noche en la Trump Tower antes de dirigirse a la fiscalía de Nueva York el martes.
El exmandatario cuenta con la asignación de policías y agentes judiciales, así como agentes del Servicio Secreto, para escoltarle por la ciudad.
En Nueva York, la Torre Trump en la 5ª Avenida, donde según los medios pasará la noche el republicano, se encuentra rodeada de policías en alerta máxima en previsión de posibles disturbios.
«Iré a un tribunal, lo crean o no. ¡No se suponía que Estados Unidos fuera así!», escribió en la red Truth Social el exmandatario, que ha lanzado su campaña para volver a la Casa Blanca en 2024.
«El fiscal corrupto no tiene caso», dijo sobre el hombre que lleva el proceso en su contra. «Lo que sí tiene es una jurisdicción donde es IMPOSIBLE que yo tenga un Juicio Justo», añadió al anunciar su viaje a Nueva York, su ciudad natal.
El martes, como parte de su comparecencia, se someterá al procedimiento estándar de toma de huellas dactilares y fotografía, lo que probablemente dará lugar a una de las fotos de ficha policial más famosas de la era moderna.
Después comparecerá ante el juez de origen colombiano Juan Merchán, que le leerá los cargos, todavía reservados, que se le imputan, una treintena, según algunos medios locales.
Trump se declarará no culpable, según han adelantado sus abogados, por lo que el caso se dirige hacia un juicio.
Entretanto, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, advirtió la policía neoyorquina vigilará cualquier manifestación para evitar disturbios.
Aunque no tenemos amenazas específicas, personas como Marjorie Taylor Greene (congresista por Georgia y seguidora del expresidente), conocida por difundir información errónea y discursos de odio, dijo que vendrá a la ciudad. Cuando esté en la ciudad, que se comporte de la mejor manera”, advirtió.
La investigación
Aún cuando las acusaciones formales son desconocidas, ya que se anunciarán durante la visita del expresidente a la Fuscalía en Nueva York, la investigación se centra en el pago de 130.000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels por parte del antiguo abogado de Trump, Michael Cohen, cuyo monto fue reembolsado más tarde por el entonces presidente.
Dado que el pago a la actriz en cuestión se realizó para evitar que la noticia de una cita que sucedió años antes interfiriera con la candidatura presidencial de Trump en 2016, la fiscalía de Nueva York argumenta que podría constituir “una contribución ilegal de campaña”.
En Nueva York, como parte de su comparecencia prevista para el martes, el exmandatario se someterá al procedimiento estándar de toma de huellas dactilares y fotografía.
Trump, que tiene previsto dar un discurso el martes a su regreso a Florida, tachó el proceso judicial de «cacería de brujas» y «persecución política», y arremetió contra el juez asignado para tomar su declaración.
«En el aire»
La policía de Nueva York está en alerta máxima ante la comparecencia extraordinaria, con la posibilidad de que se produzcan protestas callejeras de partidarios y detractores de Donald Trump.
El cuerpo policial ordenó a sus 36.000 agentes que estén uniformados y listos para desplegarse, según ha informado NBC News citando fuentes oficiales.
La comparecencia de un expresidente ante un fiscalía es inédita y por lo tanto no hay indicaiones sobre el proceso a seguir.
«Todo está en el aire», dijo el abogado de Trump, Joe Tacopina, en CNN el domingo.
No obstante, es poco probable que Trump sea escoltado ante las cámaras de los medios de comunicación, ya que se trata de un expresidente bajo la protección del Servicio Secreto.
«Esperemos que esto sea lo menos doloroso y más elegante posible para una situación como esta», señaló el abogado.
Aunque los cargos específicos aún permanecen bajo sello, el caso presentado por el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, gira en torno a la investigación de los 130.000 dólares pagados a la estrella porno Stormy Daniels antes de las elecciones de 2016.
«Este caso ni siquiera es jurídicamente sólido. De hecho, es una broma. Y no sobrevivirá a una impugnación ante un tribunal», afirmó el letrado, Joe Tacopina.
«Creo que un juez imparcial reconocerá probablemente que hay algo fundamentalmente equivocado y que estamos cruzando el Rubicón con esta persecución política», añadió otro de los abogados del exmandatario (2017-2021), James Trusty, en la cadena Fox.
«Afortunadamente, sospecho que la inculpación será legalmente frágil y que habrá una oportunidad para que el juez haga lo correcto», agregó.