208 periodistas han salido de Nicaragua desde las protestas opositoras de 2018, de acuerdo a información divulgada por la Fundación para la Libertad de Expresión y Democracia (FLED), en medio de una escalada contra la disidencia del régimen de Daniel Ortega.
Es habitual encontrar descalificaciones a la prensa libre en los discursos públicos tanto del propio Ortega como de su esposa y vicepresidente, Rosario Murillo, quienes han tildado de «criminales» y «terroristas» a los medios críticos.
«Ya hay 208 periodistas en el exilio y eso significa una situación catastrófica para la prensa independiente en Nicaragua, porque los oficialistas siguen en Nicaragua», afirma en el medio La Voz de América el director de la FLED, Guillermo Medrano.
El número de periodistas exilados resulta alarmante cuando se tiene en consideración que el país centroamericano tiene una «nómina de periodistas activos que no sobrepasa los 500».
Esta semana el régimen ha celebrado el 44 aniversario del arribo al poder de la Revolución Sandinista, cuando en 1979 el dictador Anastasio Somoza salió de Nicaragua. Daniel Ortega ya acumula 22 años en el poder, si se suman sus dos presidencias: la de 1985 a 1990 y la de 2007 hasta la actualidad. Adicionalmente el tirano nicaragüense ejerció la jefatura de la junta de Gobierno establecida luego de la caída del somocismo por espacio de 5 años.