Bogotá, 20 jul (EFE).- El presidente colombiano, Gustavo Petro, instalará este jueves, Día de la Independencia, el nuevo periodo de sesiones ordinarias del Congreso Nacional, en el cual su Gobierno buscará la aprobación de las polémicas reformas que no pasaron en la anterior legislatura.
Petro dará un discurso ante las dos cámaras del Congreso después de encabezar en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina una celebración patriótica con énfasis en el reciente fallo de la Corte Internacional de Justicia que sentenció que Nicaragua no puede extender su plataforma continental más allá de las 200 millas náuticas que delimitan su frontera con Colombia.
La prioridad del mandatario y del partido oficialista Pacto Histórico en la nueva legislatura serán las controvertidas reformas que no pudo aprobar en el periodo pasado por la crisis de la coalición de Gobierno luego de que varias fuerzas de centro y centroderecha manifestaran su preocupación por el contenido de los proyectos de ley.
“En el periodo de sesiones que arranca el 20 de julio la bancada de Gobierno y su coalición buscarán avanzar en los proyectos de reformas sociales”, manifestó este jueves el senador Iván Cepeda, del Pacto Histórico.
Cepeda recordó que en la anterior legislatura comenzó el trámite de la reforma pensional, la laboral y la del sistema de salud, las tres muy criticadas por distintos sectores políticos, económicos y sociales, “y a esas reformas se agrega ahora la reforma a la educación pública y también la del código minero”.
Cambios en educación y minería
La reforma de la educación pública, que será una de las novedades de la nueva legislatura, plantea unos cambios para que la enseñanza sea un derecho fundamental, así como la modificación de la Ley 30 de 1992, que reglamenta la educación superior.
Con la reforma del código minero se busca que el Estado tenga empresas que participen en proyectos en este sector; que el Banco de la República sea el único que compre el oro extraído en el país; mejorar la exploración y producción de minerales como el cobre, el litio y el níquel, además de declarar a la industria minera como de “interés nacional estratégico e interés social”.
Para lograr la aprobación de esas reformas, Petro no solo tendrá que recomponer la relación con partidos como el Liberal, el Conservador y de la U, que se alejaron de la coalición de Gobierno, sino lidiar con la oposición de otros como el Centro Democrático y Cambio Radical, que tendrán sus propios proyectos legislativos.