ROCHESTER — En un nuevo plan de política presentado el lunes, el aspirante presidencial republicano Ron DeSantis apunta a China con una “Declaración de Independencia Económica” que también aborda impuestos, regulaciones, gastos y educación.
Hablando en un almacén de Nueva Hampshire, el gobernador de Florida prometió impulsar la economía y luchar por la clase media.
“Retomaremos el control de nuestro destino y nos aseguraremos de que nuestro futuro sea tan orgulloso, independiente y libre como nuestro pasado”, dijo en Prep Partners Group, que coordina el almacenamiento, la distribución y otra logística para otras empresas.
DeSantis afirmó que arrebatará el control económico a China poniendo fin al estatus comercial preferencial de la nación, prohibiendo las importaciones de bienes fabricados con propiedad intelectual robada y evitando que las empresas compartan tecnologías cruciales con China.
El plan económico de 10 puntos es la tercera propuesta política importante presentada por DeSantis, cuya campaña ha tenido problemas en las últimas semanas. Aunque durante mucho tiempo fue visto como el principal rival del expresidente Donald Trump, DeSantis despidió a más de un tercio de su personal y su campaña se ha visto mermada.
Durante la presentación de su plan económico, DeSantis se centró en los gastos imprudentes del gobierno federal. Su plan lo describe como un “nuevo alguacil en la ciudad” que vetará los gastos innecesarios y exigirá requisitos de trabajo para los programas de asistencia social. También afirmó que podría lograr un crecimiento económico anual del 3% manteniendo los impuestos bajos, eliminando la burocracia e incentivando la inversión.
En el frente de la educación, DeSantis dijo que dejará de incentivar los “títulos inútiles” al responsabilizar a las universidades por los préstamos que acumulan sus estudiantes. Su plan también promoverá programas vocacionales y de aprendizaje que eduquen a “artesanos e ingenieros” en lugar de “administradores y burócratas politizados”.