El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), salió el martes en defensa de su homólogo colombiano, Gustavo Petro, a quien asume como la «víctima» de una «reacción conservadora», tras ser señalado por su propio hijo de haber recibido dinero proveniente del narcotráfico para financiar su campaña presidencial el año pasado.
«Ahora que el pueblo de Colombia decide apoyar al presidente Petro y está enfrentando una reacción conservadora de mucho tiempo, campañas mediáticas en su contra. Y ahora que se presenta esta situación familiar quieren menguar, socavar su fortaleza moral, política», dijo AMLO en una conferencia de prensa.
La actitud del mandatario mexicano es similar a la sostenida en meses previos con el ex presidente izquierdista peruano, Pedro Castillo, destituido por intentar disolver el Congreso e implantar un Gobierno con poderes especiales en diciembre pasado; pero a quien López Obrador ha defendido reiteradamente, al punto de pedir su restitución en el cargo.
Adicionalmente el jefe del Ejecutivo mexicano ratificó que el 8 de septiembre próximo visitará Colombia para reunirse con Petro.