Editorial Panam Post,
El aparente tono unificador al que apela el presidente chileno, Gabriel Boric, no persuade a la mayoría del país, especialmente en la víspera de la conmemoración de los 50 años del golpe contra el socialista Salvador Allende -prevista para el próximo 11 de septiembre. para intentar convencer a los distintos sectores políticos de la necesidad de un acuerdo condenatorio del suceso. Para el analista político, Rodrigo Penafreta, “Boric no es un moderado sino un incompetente para aplicar sus ideales”.
En entrevista con PanAm Post, el abogado sostiene que los ideales del mandatario son “bastante radicales” pero advierte que su personalidad es un “poco indecisa y en muchos casos entonces cambia de opinión. Se le dice el volteretas en Chile” precisa.
Entre los vaivenes del mandatario para concretar medidas o decisiones resalta no solo con la falta de estrategias para alinear a propios y adversarios frente a un hito histórico sino también con la falta de acciones legales en contra de altos funcionarios vinculados a la entrega de recursos públicos directa a fundaciones aliadas del Ejecutivo que detonó un escándalo de corrupción.
A juicio de Prenafeta la inercia legal de Boric equivale a “una falta de voluntad” para perseguir a los responsables, porque están “muchos de ese círculo involucrados”.
En ese sentido, subrayó que “en la política chilena cuando hay casos de corrupción muy grandes se suele llegar a los llamados acuerdos” porque “el Poder Judicial en la práctica no es demasiado independiente en Chile. Los jueces de la Corte Suprema son nombrados a dedo por el presidente con acuerdo de 2/3 del Senado y todos los jueces ordinarios hacia abajo son nombrados también por una terna de 3/5 propuestas por esa misma Corte Suprema, entonces inevitablemente todo el Poder Judicial va tener influencia mayor o menor del mundo político y económico”.
Un remate de año catastrófico
En el análisis de Prenafeta -además de la incompetencia de Boric- abundan proyecciones pesimistas para el 11 de septiembre en medio del panorama de tensión que prevalece. Cree que “lo más probable haya un nivel de destrucción no menor, saqueos y destrucción”.
A ello, agrega “un aumento de la polarización” porque “no hay ningún acuerdo transversal” con respecto a la conmemoración de los 50 años del golpe contra Allende debido a las posiciones contradictorias que se mantienen.
“La posición de la izquierda lo tilda de injustificable e inaceptable mientras que la derecha mantiene que Allende propició la medida por la decadencia de su gobierno” explica.
Además insiste en que “a la mayoría de la población no le interesa demasiado este tema porque además de que ha pasado bastante tiempo, el país está sufriendo numerosos problemas económicos con un alza del desempleo, delincuencia, problemas migratorios y corrupción sistemática.
¿Cómo terminará Chile el 2023 después de la desastrosa conmemoración de Allende, el cuarto aniversario del estallido el próximo 18 de octubre y el segundo plebiscito de salida el 17 de diciembre? “Catastrófico porque Boric hace muchas propuestas pero se rechazan todas, entonces, todo se mantiene igual, decadente pero se continúa en esa tendencia que podría ser peor si sacaran sus reformas”.
Sin esperanzas electorales
Según la percepción de Prenafeta “al sexto mes de gobierno de Boric se notó su fracaso” además de su incompetencia para liderar. De ahí deriva que no le resulte sorpresivo el debate que avanza entre las filas aliadas del mandatario para elegir a su reemplazo argumentando que “cuando un gobierno es pésimo, muy malo e incompetente se empieza a hablar antes de las presidenciales”.
Sin embargo, la discusión complica a la coalición del presidente porque “el Frente Amplio está desprestigiado por los casos de corrupción” lo cual vuelve inviable el triunfo de alguno de sus dirigentes en los venideros comicios.
Los más probable -dice- es que una figura de la centro derecha o la derecha gane las próximas elecciones ante el fracaso del gobierno de Boric.