CHICAGO — Aproximadamente 1.600 migrantes que solicitaron asilo en Estados Unidos serán reubicados de las estaciones de policía de Chicago a campamentos acondicionados para el invierno, según un plan del alcalde Brandon Johnson, de acuerdo con un reporte publicado el jueves.
La reubicación se llevará a cabo “antes de que el clima comience a cambiar”, dijo Johnson en una entrevista con el periódico Chicago Sun-Times.
Las enormes carpas podrán albergar hasta 1.000 migrantes, comentó el alcalde, y los campamentos ofrecerán alimentos y programas recreativos y educativos.
Actualmente, 16 albergues de la ciudad acogen a 13.500 migrantes, y cada día llegan más, con un costo para la ciudad de unos 30 millones de dólares al mes, de acuerdo con el periódico.
El gobierno de Johnson está trabajando con el estado y con el condado de Cook para establecer más albergues que retiren un poco de la presión sobre Chicago, comentó.
“Estas familias están llegando a la ciudad de Chicago… Si no creamos una infraestructura donde podamos apoyar y, francamente, contener a estos individuos que han sufrido un gran daño, individuos que están desesperados… ese tipo de desesperación conducirá al caos”, señaló Johnson.
Hace unos días, varios migrantes fueron arrestados en incidentes separados como sospechosos de amenazar o golpear a agentes en una estación de policía.
Los contribuyentes se vieron obligados a gastar 400 millones hasta ahora para lidiar con la crisis que ya esta causando molestias en los residentes. Chicago es la tercera ciudad que más personas ha recibido y sus refugios ya no dan abasto.