LA PAZ.- El líder izquierdista Evo Morales anunció este domingo su intención de competir por la presidencia de Bolivia en las elecciones programadas para el año 2025. Este anuncio llega en medio de una creciente tensión con el gobierno encabezado por su protegido político, Luis Arce.
Mediante sus redes sociales, Morales expresó su decisión de postularse para liderar nuevamente Bolivia, declarando: «Hemos decidido responder a las peticiones de nuestra base y de tantos compatriotas que nos han instado a ser candidato a la presidencia de nuestra amada Bolivia».
El exgobernante de 63 años explicó que esta medida es una respuesta «forzada por los constantes ataques del gobierno», alegando que ha sido objeto de amenazas que ponen en peligro su integridad física.
Este anuncio de Morales marca un hito, ya que es el primer político boliviano que se postula para la presidencia en las elecciones de octubre de 2025.
En paralelo, el partido oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) planea llevar a cabo un congreso la próxima semana con el propósito de establecer una dirección que organice unas elecciones primarias en diciembre o enero, destinadas a seleccionar a los candidatos presidenciales y vicepresidenciales.
Evo Morales y disputas públicas
En los últimos meses, Morales y los líderes del MAS han estado involucrados en una serie de disputas públicas con los ministros del Interior, Eduardo del Castillo, y de Justicia, Iván Lima, a quienes acusan de liderar acciones políticas en su contra y de intentar implicarlo en casos de corrupción.
El conflicto interno en el partido oficialista gira en torno a la incertidumbre sobre quién será finalmente el candidato del MAS: Morales o Arce. El presidente, en el cargo desde noviembre de 2020, afirmó que la discusión sobre su reelección aún no está en la agenda.
En Bolivia, existe un debate en curso sobre si Morales está habilitado para postularse nuevamente. Según la Constitución, el periodo presidencial es de cinco años, y se permite una única reelección consecutiva. El ministro Lima señaló que el Tribunal Constitucional deberá determinar si esta disposición permite que un expresidente se postule nuevamente después de que haya transcurrido al menos un periodo presidencial.