LA HABANA. – A pesar de un aumento significativo en las exportaciones de petróleo de Venezuela hacia Cuba, con cifras que no se habían alcanzado en todo el año 2023, la crisis energética en la Isla continúa, generando preocupación entre los ciudadanos y las autoridades.
Según los datos proporcionados por la estatal venezolana PDVSA, los envíos de petróleo a Cuba alcanzaron un récord de 86.000 barriles diarios (bpd) durante el mes de septiembre, marcando un incremento de más de 21.000 bpd en comparación con los envíos de agosto, que se situaron en 65.000 barriles diarios.
A primera vista, según reseña Diario de Cuba, este aumento en los suministros de petróleo podría haber sido considerado un alivio para la nación caribeña, que enfrenta una aguda escasez de energía. Sin embargo, la realidad en Cuba es diferente, la crisis energética en la Isla ha empeorado considerablemente.
La estatal Unión Eléctrica (UNE) de Cuba anunció un apagón programado de 890MW, equivalente al 30% del consumo nacional, debido al déficit de generación eléctrica. Estas cifras son incluso más alarmantes que las registradas en días anteriores, cuando se producen apagones en diversas regiones de la Isla.
Las patanas turcas que se conectan a la subestación de Melones, en la bahía de La Habana, ni siquiera pueden operar debido a la falta de combustible. Además, se reportan averías que dejarán fuera de servicio 904MW en generación distribuida y otros 185MW en mantenimiento.
Cuba reconoce escasez de combustible
El ministro de Energía y Minas cubano, Vicente de la O Levy, reconoció públicamente que la escasez de combustible está provocando déficits diarios de energía eléctrica de al menos 700MW. Esto llevó a la paralización de parte del transporte público ya la implementación del teletrabajo como medidas para conservar la energía.
Según el funcionario, el problema se debe en parte a incumplimientos de contratos de suministro de combustible por parte de algunos proveedores, lo que ha obligado a Cuba a buscar alternativas de adquisición de petróleo.
La falta de inversión en la infraestructura energética, los cortes de energía recurrentes, los problemas de mantenimiento y la inestabilidad económica en la Isla continúan siendo desafíos importantes para superar. A pesar de los esfuerzos por parte de Venezuela para aumentar sus envíos de petróleo, la situación en Cuba deja en claro que el camino hacia la estabilidad energética sigue siendo un desafío formidable.