WASHINGTON.- Ante los recientes intentos de las autoridades de Guatemala de anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2023, organizaciones internacionales como Human Rights Watch (HRW) y la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés) instaron a la comunidad internacional a aumentar la vigilancia sobre el país centroamericano.
Tanto la Fiscalía, el Congreso como el Tribunal Supremo han sido señalados como responsables de socavar el Estado de Derecho y los derechos de la población guatemalteca, según indicaron HRW y WOLA. En respuesta a estas preocupaciones, líderes de todo el mundo han expresado su apoyo a la protección de la democracia en Guatemala.
«La comunidad internacional debe mantener una vigilancia constante para garantizar la integridad del proceso democrático en Guatemala. Los recientes acontecimientos destacan la urgente necesidad de un escrutinio internacional continuado», afirmó el director de la región de América de HRW, Juan Pappier, en un comunicado conjunto con WOLA.
Crisis política en Guatemala
Según la directora de América Central de WOLA, Ana María Méndez Dardón, agregó que hay razones para creer que podrían intensificarse los intentos de obstaculizar la asunción de la presidencia por parte del electo Bernardo Arévalo y su vicepresidenta, Karin Herrera, en 2024.
Estas preocupaciones surgen después de que la Fiscalía guatemalteca solicitara la retirada de la inmunidad de Arévalo y Herrera por su participación en la toma de la Universidad de San Carlos, una acción de protesta contra el proceso de elección de un nuevo rector de la institución educativa.
Además, la comunidad internacional ha condenado las acciones de la Policía Nacional, que, por orden del Ministerio Público, llevó a cabo registros en viviendas de simpatizantes y afiliados de Semilla como parte de una investigación por presunto lavado de dinero.
En un giro positivo, la atención internacional ha contribuido a un mayor escrutinio de la situación, y líderes de diferentes países han expresado su apoyo a la democracia guatemalteca. La presión internacional podría ser crucial para garantizar que los resultados electorales se respeten y que se mantenga la estabilidad democrática en el país.