FLORIDA.- El senador republicano Marco Rubio reafirmó su postura contraria al sistema de parole humanitario, programa que otorga permisos de residencia por dos años a alrededor de 30 mil migrantes mensuales provenientes de Cuba, Haití, Venezuela y Nicaragua, bajo el patrocinio de ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes.
Rubio expresó sus preocupaciones sobre el abuso del sistema debido a la gran afluencia de personas. Argumentó que, si bien están dispuestos a ayudar a aquellos que ya se encuentran en el país, no pueden permitir que un elevado número de personas llegue a la frontera de Estados Unidos sin un proceso ordenado. Según el senador republicano por Florida, esto no es sostenible y podría incentivar una migración descontrolada.
Desde su implementación a principios de 2023, alrededor de 297 mil personas, incluyendo más de 62 mil cubanos, han ingresado legalmente a los Estados Unidos bajo esta medida de la Administración de Joe Biden, Según reseña Martí Noticias. Sin embargo, el programa enfrenta críticas desde el principio, incluyendo una demanda presentada por Texas y otros 20 estados que lo consideran un «sistema de inmigración clandestino». El resultado de este caso aún está pendiente.
La administración demócrata defiende el parole humanitario, argumentando que ha contribuido a la reducción de detenciones en la frontera y ha desincentivado rutas migratorias peligrosas. Sin embargo, los registros de la Oficina de Aduana y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), revelan un aumento en la inmigración sin precedentes en EEUU con aproximadamente 9 millones de encuentros desde que Biden se encuentra en la Casa Blanca.
Reevaluar casos de «refugiados»
Adicionalmente, Rubio cuestionó la práctica de algunos refugiados que, tras recibir ayuda del gobierno estadounidense, regresan a sus países de origen en poco tiempo. Considera que esto plantea interrogantes sobre la autenticidad de su estatus de refugiado y sugiere una necesidad de reevaluación en tales casos.
El senador republicano expresó su preocupación por la crisis migratoria en la frontera sur y subrayó los riesgos que presenta para la seguridad nacional de Estados Unidos. Hizo hincapié en la necesidad de establecer límites para evitar una carga insostenible para el país.
La crisis migratoria se ha convertido en un tema candente en el debate político, especialmente a pocos meses de las elecciones presidenciales de 2024. Mientras tanto, el presidente Biden prometió «cerrar la frontera» con México si se aprueba un acuerdo bipartidista sobre inmigración que actualmente se encuentra en negociación en el Congreso.