BOGOTÁ.- La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció la suspensión del cese al fuego decretado el pasado viernes en varios municipios del departamento de Chocó debido a la colaboración de fuerzas paramilitares con las autoridades locales y tan solo unos días después de que acordaran una nueva prórroga del alto el fuego con el Gobierno.
La Delegación de Diálogos del ELN publicó en redes sociales que no están en desacuerdo con las negociaciones de paz y sostuvo que los paramilitares, en colaboración con las Fuerzas Armadas, tienen intención de continuar con la «guerra contrainsurgente» para doblegarlos, lo que supondría una violación del alto el fuego.
En ese sentido, desmintieron las informaciones de que el Ejército defiende a los guerrilleros de estos grupos armados, y que estas ayudan a los paramilitares para actuar contra las comunidades de la región.
Poco antes, el Ejército colombiano informó sobre la muerte de un militar a manos de la estructura Franco Benavides de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la región de Nariño, lo que puede hacer tambalear las conversaciones y el alto el fuego entre las autoridades y las guerrillas.
El Gobierno colombiano se encuentra en diferentes fases sobre las negociaciones de paz tanto con la disidencia del Estado Mayor Central (EMC) de las FARC como con el ELN, lo que no les ha impedido hasta la fecha seguir con algunas de sus actividades como los secuestros.
La semana pasada, el gobierno colombiano y el ELN acordaron prorrogar el cese al fuego bilateral, así como la suspensión de los secuestros extorsivos y la utilización de menores en el conflicto.
El alto el fuego, que comenzó el martes de la pasada semana, se extenderá por seis meses, según lo acordado en un documento firmado por los equipos negociadores de ambas partes, justo antes de que expirara el acuerdo anterior.
La suspensión de los secuestros, denominados «retenciones de carácter económico» por el ELN, será vigilada por el mecanismo de monitoreo y verificación, en el que participa la misión de las Naciones Unidas en Colombia. Sin embargo, el acuerdo no especifica si el ELN liberará a los secuestrados en su poder ni en qué condiciones se encuentran.