WASHINGTON- Más 80% de los estadounidenses estima que el gobierno del presidente Joe Biden ha hecho «mal» o «muy mal» su trabajo en inmigración y en especial en la frontera con México, confirma un estudio de Pew Research Center.
Biden, acostumbrado a recibir una baja nota en las encuestas sobre todos los temas, ahora se enfrenta a que «las calificaciones actuales son extraordinariamente bajas», de acuerdo con el informe a menos de nueve meses para las elecciones presidenciales, en las que aspira a la reelección.
Sólo el 18% de los encuestados considera que el gobierno lo hace bien, mientras que «más del 80% afirma que está haciendo un mal o muy mal trabajo, incluido el 45% que dice que está haciendo un pésimo trabajo», precisa.
Como cabe esperar las opiniones son negativas entre los republicanos (89%), pero sorprende que el 73% de los demócratas opine lo mismo, «el porcentaje más alto registrado» durante su mandato respecto a este tema.
En economía, Biden ha recibido descalificaciones similares y se ubica como el presidente con peores registros de aprobación durante sus tres años de mandato.
El cierre de la frontera y el muro
Una mayoría de estadounidenses (60%) es partidaria de aumentar el número de jueces y personal migratorio para tramitar más rápido las solicitudes de asilo. Otro gran por ciento prefiere el cierre de la frontera.
La brecha es abismal cuando se les pregunta por la ampliación del muro a lo largo de la frontera con México, una de las políticas más polémicas del mandato de Donald Trump, el favorito para la nominación presidencial republicana.
En 2019, el 82% de los republicanos estaba a favor de ampliar el muro, en comparación con solo el 6% de los demócratas.
En este estudio, el 72% de los conservadores quiere el muro junto al 15% de los demócratas, más del doble de incremento.
¿Por qué vienen los migrantes? Las respuestas difieren entre los simpatizantes de ambos partidos, pero siete de cada diez estadounidenses citan «las mejores oportunidades económicas en Estados Unidos como una razón importante», añade el estudio.
Entre los motivos, los republicanos se inclinan por la creencia de que «las políticas de inmigración estadounidenses facilitarán la permanencia en el país una vez que lleguen», mientras que los demócratas destacan la violencia en sus países de origen.
Los conservadores consideran el tema como «un caos» migratorio y de seguridad nacional (70%), los demócratas lo catalogan como un «problema importante».