El petróleo es la materia prima más cotizada y negociada que existe. La mayoría de los países dependen de esta fuente de energía, motor de la economía mundial y que se ha convertido en el recurso más utilizado para la maquinaria industrial, de transportes o electricidad, entre otros. Potencias como Estados Unidos, Arabia Saudí o Rusia cuentan con las importantes empresas petroleras, así como Venezuela o Nigeria poseen grandes reservas naturales. En América Latina, asimismo, se encuentra un trozo de tierra con más crudo que muchos territorios petroleros en el planeta.
Contestar a la pregunta sobre cuánto petróleo hay en el mundo no puede ser contestada de forma exacta, pues en verdad dependería de estimaciones. Según diversos estudios, actualmente quedan en el planeta entre 600.000 y 800.000 millones de barriles de petróleo de crudo por extraer, lo que supone que estas reservas no se agotarían hasta más allá de 2040, tal y como sugiere la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Entre sus múltiples usos, este combustible nos proporciona agua caliente, calefacción y electricidad, y aunque se cuenta con combustibles alternativos como biodiesel, gas natural o hidrógeno, lo cierto es que su importancia es casi insustituible.
Así es la Faja Petrolífera del Orinoco, el rincón de Venezuela con la mayor parte de reservas probadas de petróleo del mundo
Venezuela es el rey de las reservas de petróleo probadas del mundo, cantidades estimadas de petróleo que con una certeza razonable son recuperables en la actualidad, tanto comercial como técnicamente. Asimismo, otros países como Arabia Saudí o Canadá, conocido por sus vastas reservas de petróleo en forma de arenas bituminosas en la provincia de Alberta, se encuentran entre las potencias petroleras mundiales. También Irán, Iraq, Libia, Kuwait, Emiratos Árabes, Nigeria o Libia, entre otros.
Las reservas probadas de crudo del país venezolano ascienden a los 300.878 millones de barriles, las más grandes del mundo. La gran curiosidad es que el 90% de todas esas reservas se encuentran en un trozo de tierra conocido como la Faja Petrolífera del Orinoco.
Esta extensa área se encuentra en la cuenca de río Orinoco, el tercero más caudaloso del mundo, se extiende a lo largo de aproximadamente 55.314 kilómetros cuadrados y abarca varios municipios de la región. Está enclavada en una zona cuyo origen se debe a la acumulación de los sedimentos provenientes de la Cordillera de los Andes y en donde el agua es el principal protagonista.
Contiene importantes reservas de petróleo pesado y extrapesado, un tipo de crudo más viscoso que el convencional y que requiere procesos de extracción y refinación adicionales para poder convertirlo en productos como gasolina o diésel.
El potencial petrolero de esta zona comenzó a explorarse en 1936. No obstante, a día de hoy Venezuela está muy lejos de una producción petrolera de tres millones de barriles diarios, en parte por las sanciones impuestas por Estados Unidos, la falta de inversores o la crisis económica que arrastra el país desde hace años.