WASHINGTON — El expresidente y candidato republicano a las presidenciales, Donald Trump, dijo este miércoles estar dispuesto a debatir «cuando sea y donde sea» con su rival demócrata, el mandatario Joe Biden.
«Es importante, por el bien de nuestro país, que Joe Biden y yo debatamos temas vitales para Estados Unidos y el pueblo estadounidense», escribió el expresidente en su red Truth Social.
«Por eso llamo a que se realicen debates cuando sea, donde sea, en el lugar que sea», aseguró.
En contraste, Trump fue desafiado repetidamente por Nikki Haley y sus otros rivales en las primarias republicanas para asistir a los debates televisados, pero él siempre se negó argumentando que no ganaba nada al compartir protagonismo con sus lejanos perseguidores en las encuestas.
En su mensaje, el expresidente incluso se mostró dispuesto a que sus debates frente a Biden los dirija «el corrupto Comité Nacional Demócrata (DNC), o su filial, la Comisión de Debates Presidenciales (CPD)».
«Respuesta rápida» a Biden
Trump además prometió llevar a cabo una «respuesta rápida» a Biden durante el discurso del estado de la Unión del jueves, porque «es importante para el país obtener la verdad».
Salvo alguna sorpresa, tras las abrumadoras victorias en las primarias de sus respectivos partidos, Trump y Biden se enfrentarán en las elecciones presidenciales de noviembre.
Biden parte como el principal, y casi único, candidato para representar a los demócratas en las elecciones. Trump, por su parte, ha convencido también a gran parte del electorado republicano por delante de Nikki Haley, quien ya anunció su retiro de las primarias tras su derrota en las votaciones del «supermartes».
Ambos protagonizaron las últimas elecciones estadounidenses, celebradas en 2020. En aquella ocasión, Biden se impuso. Hoy su popularidad es menor del 40%, a los estadounidenses les preocupa la alta inflación y la migración cuya política de fronteras abiertas está generando un caos en el país.
También les preocupa la avanzada edad del mandatario que tendría 82 años de ganar la reelección y de los episodios de desorientación que a veces padece en actos públicos de la presidencia.