CARACAS- Venezuela exigirá a sus ciudadanos en el extranjero documentos vigentes para ingresar al país, confirmó este miércoles el ministro de Transporte, con lo que deja atrás una vieja normativa que permitía la entrada con pasaportes vencidos o cédula de identidad.
«Lo que he podido conocer a través de canales oficiales es que el Estado venezolano ha adoptado algunas medidas para que todos los pasajeros que vengan a Venezuela, vengan con sus documentos vigentes», dijo el ministro Ramón Velásquez Araguayán a la prensa.
Hasta la semana pasada los venezolanos podían ingresar a su país con el pasaporte vencido, pero desde el viernes aerolíneas en el extranjero comenzaron a difundir información sobre nuevas políticas de ingreso «con aplicación inmediata».
«Ruptura relaciones diplomáticas»
Las autoridades del régimen no se habían pronunciado sobre la decisión, que se produce en medio de la ruptura de relaciones diplomáticas con siete países de América Latina por los cuestionamientos de sus gobiernos a la reelección de Nicolás Maduro en julio, denunciada como un fraude por la oposición.
Las relaciones con Estados Unidos también están rotas desde 2019.
«Los pasajeros venezolanos deben tener su pasaporte venezolano vigente al momento del viaje», informaba en una aviso virtual la aerolínea Latam.
«En caso de que no cuenten con su pasaporte venezolano vigente, deberán solicitar un ‘Documento de Viaje’ ante el Consulado o la Embajada venezolana acreditada en el exterior y registrarlo con la aerolínea con al menos 72 horas antes del embarque», añadió la compañía brasileño-chilena.
Latam precisó igualmente que el régimen venezolano tampoco permitirá el ingreso de sus ciudadanos con cédula de identidad venezolana ni con pasaportes de otros países en los casos de doble nacionalidad.
Sin mayores detalles, Velásquez Araguayán prometió que consulados y embajadas darán «facilidades para que los venezolanos y las venezolanas que quieran retornar (…) puedan contar con la actualización de sus documentos».
En redes sociales, usuarios que tienen el pasaporte vencido y que viven en países «sin embajada» por la ruptura de relaciones reclamaban más informaciones al Servicio de Extranjería sobre cómo proceder.