La vicepresidenta ejecutiva del régimen de Venezuela, Delcy Rodríguez, se reunió este lunes con el embajador de China en la nación caribeña, Lan Hu, para revisar la cooperación bilateral, así como para reafirmar la voluntad de abogar conjuntamente por la creación de un “nuevo orden político y económico”.
A través de una publicación en Telegram, la Vicepresidencia indicó que ambos funcionarios reafirmaron su voluntad de abogar conjuntamente por la “paz mundial” y la creación de un “nuevo orden político y económico más justo y equitativo”.
Además, prosiguió, condenaron la “imposición de medidas coercitivas unilaterales impuestas ilegalmente contra los pueblos libres y soberanos”.
La Vicepresidencia indicó que Rodríguez y Hu también revisaron el “mapa de cooperación” bilateral que alcanza actualmente, dijo, “más de 600 acuerdos estratégicos”.
El pasado 23 de septiembre, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, se reunió con su homólogo venezolano, Yván Gil, y aseguró que China continuará respaldando a Venezuela en la defensa de su soberanía y dignidad nacional, independientemente de los cambios en el escenario internacional.
“China y Venezuela son buenos amigos y socios, e independientemente de cómo cambien las circunstancias internacionales, China continuará apoyando a Venezuela en la defensa de su soberanía y dignidad nacional, así como en el desarrollo económico y social del país”, aseguró Wang, según el comunicado de la Cancillería china.
Por su parte, Gil recordó que el año pasado los mandatarios de Venezuela y China elevaron sus relaciones a una “asociación estratégica a toda prueba”, y que este año celebran el 50 aniversario de sus lazos diplomáticos, marcando un “momento clave” en su historia bilateral.
La persecución del régimen no cesa
Miembros de la oposición mayoritaria de Venezuela pasaron de estar permanentemente en la calle a ejercer la política desde el resguardo y la virtualidad, ante la persecución que denuncian en su contra, sobre todo tras las presidenciales del 28 de julio, en las que Nicolás Maduro fue proclamado ganador, lo que el antichavismo considera fraudulento.
La líder María Corina Machado se encuentra en “la clandestinidad” desde el 1 de agosto, al temer por su “vida” y “libertad”, y ha salido de manera puntual a algunas manifestaciones, a las que ha llegado encubierta.
Según la ex diputada, fueron precisamente “las crecientes amenazas” las que impulsaron la salida del país del abanderado de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) -mayor bloque opositor-, Edmundo González Urrutia, quien llegó a España el 8 de septiembre, para pedir asilo al considerar que sufría persecución política y judicial en Venezuela.
Para Juan Pablo Guanipa, estrecho colaborador de ambos líderes opositores, si bien antes del 28 de julio “la persecución era una realidad”, después ha sido “incontenible”, con una “represión” contra “todos los dirigentes políticos”.
“Eso nos obligó a resguardarnos y, en mi caso, a salir puntualmente, cuando hay una convocatoria importante”, dijo a la agencia de noticias EFE el ex diputado, quien señaló que “muchos” dirigentes “nacionales, regionales, municipales y parroquiales”, incluso del “sector estudiantil”, están en esta situación.
El resguardo, según explicó Guanipa, los obliga a renunciar a la calle y, por tanto, al contacto directo con ciudadanos y representantes de distintos sectores, por lo que cambia la “forma” de hacer política, convirtiéndose en un “dirigente virtual”.
“Tenemos que ver cómo logramos ser útiles en medio de la situación”, dijo el opositor, de 59 años.
El ex primer vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) dice haberse reinventado, y ahora se dedica, en buena parte, a publicar constantemente en redes como un “mecanismo de comunicación con la gente”, mediante el cual difunde información sobre “la lucha” por el “cambio político”, y para tratar de generar “esperanza y optimismo”.
Asimismo, prosiguió, el resguardo los obliga a abandonar, por un tiempo indefinido, su “espacio natural”, en referencia al hogar, que, en su caso, está en el estado Zulia (noroeste, fronterizo con Colombia), a más de medio millar de kilómetros de distancia de donde -aseguró- se encuentra hoy.