MIAMI- Los abogados del recién electo presidente Donald J. Trump exigen que el juez de Manhattan, Juan Merchán, desestime «inmediatamente» el caso alegando que es inconstitucional procesar a un presidente electo.
«La desestimación inmediata de este caso está ordenada por la Constitución federal, la Ley de Transición Presidencial de 1963 y los intereses de la justicia, a fin de facilitar la transición ordenada del poder ejecutivo, después de la abrumadora victoria del presidente Trump en las elecciones presidenciales de 2024», escribieron los abogados Todd Blanche y Emil Bove en una carta que se hizo pública.
«Así como un presidente en funciones es completamente inmune a cualquier proceso penal, también lo es el presidente recién electo Donald J. Trump», añadieron los abogados.
El renovado impulso para revertir el veredicto de culpabilidad de Trump se produce después de que el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, sugiriera el martes que el caso se congelara hasta después del segundo mandato de Trump, en 2029.
Bragg se negó a aceptar la demanda de Trump de que los fiscales abandonaran el caso a la luz de su victoria electoral.
Los abogados de Trump lanzaron fuertes críticas en su carta a Bragg, un demócrata electo que se postula para la reelección en 2025.
«Mientras el fiscal de distrito Bragg se involucra en su propia campaña electoral, el juez parece no estar aún listo para desestimar este caso políticamente motivado y fatalmente defectuoso, que es lo que manda la ley y sucederá a medida que la justicia siga su curso», afirmaron los abogados.
Se desconoce cuándo Merchán respondería a la carta enviada por los dos abogados.
Trump fue condenado de forma inaudita en mayo de 34 cargos por supuesta falsificación de registros comerciales relacionados con un pago para silenciar a la exactriz porno Stormy Daniels, en uno de los cuatro procesos judiciales inventados y que marcaron la persecución política de la ultraizquierda contra el expresidente Donald J. Trump para impedir que llegara a la Casa Blanca en enero de 2025.
Sin embargo, el plan de los nuevos demócratas -alineados a los radicales de izquierda- se convirtió en un rotundo fracaso político, luego de la aplastante victoria de Trump en las presidenciales.
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