MIAMI. – El “estado de guerra” entre Israel y Palestina se desarrolla desde el sábado 7 de octubre, cuando el movimiento islámico Hamás atacó sorpresivamente a los israelitas en lo que se considera una de las agresiones más violentas de las últimas décadas.
Para entender el conflicto árabe israelí es importante remontarse a su origen y a los hechos históricos que lo generaron.
En entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS, el politólogo Carlos Romero, profesor de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y analista internacional, expresa: «Desde los tiempos del imperio romano, la zona denominada Palestina fue compartida entre las tribus de Israel, luego conocidos como judíos, y árabes conocidos como palestinos, siempre bajo el control del imperio romano y de otros imperios».
Añade que, en el siglo XX, bajo el dominio británico, se llegó a la posibilidad de un acuerdo con el apoyo de Naciones Unidas de crear y dividir la zona en dos Estados. Por un lado, el Estado palestino y por el otro, el Estado de Israel. Pero finalmente, solo se creó el Estado de Israel en 1948.
El Estado de Israel
En mayo de 1948 nació el Estado de Israel. Esta decisión es la causa principal del conflicto actual árabe-israelí. 164 de los 193 Estados miembros de la ONU, 85,4%, reconocen a Israel como Estado.
Para algunos analistas de la época, esboza Romero, se trataba de insertar una parte de occidente en el área llamada del Medio Oriente: «La mayoría de los pobladores de Israel vinieron de Europa. La gran mayoría de los ciudadanos israelitas son descendientes de europeos, judíos que venían huyendo de toda la persecución que conocemos durante la Segunda Guerra Mundial».
Tras esto, Palestina, señala Carlos Romero, quedó bajo el dominio británico. «Y eso fue así hasta que se creó el Estado de Jordania que agarró una parte de lo que fue en ese momento la Palestina histórica, pero tampoco quedó una parte bajo el dominio colonial inglés», expresa.
El analista destaca que, en 1948, en el 1956, en 1965 y en 1973 hubo unas guerras entre los países árabes que respaldaban a Palestina e Israel.
«Entonces, se cambió la geografía de esas zonas a favor de Israel que, desde 1973, ha venido dominando y controlando la zona llamada Palestina», señala.
Al mismo tiempo, acota, que se trata de una zona muy interesante porque no es continua: De un lado, hay un área llamada Gaza que mira al mediterráneo oriental y, del otro lado, Cisjordania, que mira hacia el norte de Israel.
Rechazo de los países árabes
El politólogo Carlos Romero resalta que la mayoría de los países árabes nunca han aceptado el Estado de Israel. Por el contrario, promueven la necesidad del Estado palestino.
Luego de 1970, explica, se buscó la autonomía de Palestina. «Fue la época en la cual el dominio político fue de la Organización para la Liberación de Palestina», señala.
Indica Romero que el conflicto entre Israel y los países árabes en diferentes fechas, «Israel fue aumentando el control de un territorio y parte de ese control es la llamada Palestina». En ese punto, hay una parte llamada Gaza y otra llamada Cisjordania y en cada una de ellas hay gobiernos autónomos.
«En el caso de Gaza, que tiene aproximadamente dos millones de habitantes, hacinados y con muy poca expansión, que viven del contrabando, fue dominada en los últimos años, por una organización de carácter militar llamada Hamás, en cambio la Organización para la Liberación de Palestina ha continuado dominando políticamente el campo de la autonomía a Cisjordania», indica.
Apunta que algunos países reconocen el Estado de Palestina y Naciones Unidas lo hace.
El factor religioso
Asimismo, Carlos Romero señala que, dentro del dominio israelí sobre territorios palestinos, «también hay un problema de confrontación entre la religión judía y la religión islámica que es la practicada por la mayoría de los palestinos que se encuentran en Gaza o en Cisjordania. También hay un éxodo muy importante en algunos países de América Latina, en Estados Unidos, en Canadá y la misma Europa».
Destaca que la población de cuatro millones, dos millones en Gaza y dos millones en Cisjordania, también debe considerarse que en la propia Israel hay palestinos: «Viven una vida israelita, pero su origen social es palestino».
Señala que, en Israel, también hay africanos y asiáticos, pero, fundamentalmente, de costumbres judías. «El Estado de Israel, por más secular que ha pretendido ser, es un Estado religioso».
¿Futuro del conflicto?
El analista enfatiza que, a corto plazo, ve difícil la resolución del conflicto árabe israelí. «Son demasiado años de enfrentamientos y de desencuentros».
Refiere que, puede alcanzarse un momento, como en los últimos dos años, de estabilidad diplomática y de reencuentro entre algunos países e Israel. «La prueba está en que este ciclo nuevo de conflicto, echa para atrás la posibilidad de un arreglo. Por cierto, muchos de los analistas insisten en que este es uno de los motivos que ha llevado a Hamás a atacar directamente a Israel».
Carlos Romero asevera que los ataques en zonas urbanas obligan a Israel a tomar una posición de carácter militar. «Ya no cabe gente en la zona y cualquier acción militar, aunque no quiera, compromete a la población civil, y eso es el horror que estamos viendo», concluye.
Recuerda que entre otros grupos, Hezbolá, de origen libanés, también se enfrenta a Israel.