La gestión encabezada por Javier Milei, a pesar de las complicadas restricciones económicas heredadas, evidencia grandes cambios con relación a lo que venía sucediendo en Argentina. En materia de Defensa, las diferencias son notorias. El libertario convocó para la cartera a Luis Petri, quien había acompañado en las elecciones a Patricia Bullrich en la fórmula de Juntos por el Cambio, ahora al frente del ministerio de Seguridad.
Sin embargo, por lo que está sucediendo desde que asumió el libertario, queda en evidencia que no se trató de una tradicional jugada política, para sumar apoyos y poder consolidar el músculo del gobierno en materia de representación. Bullrich cuenta con total autonomía para ejercer su gestión y Petri está encabezando un proceso histórico de rearme y modernización de las Fuerzas Armadas.
La General Laura Richardson, jefe del Comando Sur, hizo referencia al proceso que está teniendo lugar en Argentina y mostró su beneplácito. Luego de la visita a Ushuaia, Richardson reconoció que en Estados Unidos hay entusiasmo con las políticas de la nueva gestión. “Una de las principales prioridades de Argentina es modernizar a sus fuerzas militares. Hay mucho equipamiento antiguo que no ha sido modificado y esa es claramente una de las cosas con las que Argentina quiere avanzar. Estamos muy entusiasmados por eso”.
Hasta el momento, Argentina alquilaba el avión Hércules C-130, pero los Estados Unidos decidieron, ante la perspectiva del nuevo gobierno, donarlo y transferirlo. También existe un fuerte respaldo en las negociaciones de los F-16 que muy pronto pasarán a engrosar la Fuerza Aérea Argentina.
Según confirmó Richardson, la cooperación con los Estados Unidos también se profundizará en el ámbito de la marina, con los buques que se desempeñan en la zona de la Antártida. “Tenemos que ayudar con eso. En ese sentido, tenemos listas de necesidades que el ministro Petri priorizará”, dijo la jefe del Comando Sur.
“Seguimos muy comprometidos con el desarrollo de Argentina”
En materia de respaldos internacionales, Milei también cosechó hoy un fuerte espaldarazo por parte del Banco Interamericano de Desarrollo. El presidente argentino participó de una reunión esta mañana en Estados Unidos con su titular, Ilan Goldfajn, que manifestó lo siguiente:
“En el BID seguimos muy comprometidos con el desarrollo de Argentina. Hoy hablamos sobre nuestro apoyo técnico para mejorar la eficiencia del gasto y la protección de las personas más vulnerables, y sobre cómo nuestro brazo para el sector privado puede fomentar la inversión y la actividad empresarial en el país”.
Por su parte, el Banco Mundial mostró buenos augurios para las perspectivas económicas en el mediano plazo de Argentina. Aunque las necesarias políticas de ajuste impedirían un crecimiento para este año, la organización considera que en 2025 el repunte será del 5%, colocándose entre los mejores desempeños de la región.