El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, convocó este 15 de noviembre a una reunión de emergencia con la Comisión de Seguridad Nacional y de Defensa. El motivo es un presunto ataque con dos misiles rusos que habría alcanzado a Przewodów, un pueblo polaco cerca de la frontera con Ucrania que dejó un saldo de dos muertos.
Es una información que comenzó a circular en medios internacionales como Associated Press y que no ha sido confirmada oficialmente. Por eso, Morawiecki pide cautela mientras transcurre la reunión sobre el supuesto ataque contra Polonia. La agencia de noticias indicó que al atacar instalaciones energéticas de Ucrania, los misiles rusos cruzaron al país miembro de la OTAN.
«Cualquier información presentada hoy a la Comisión será comunicada al público después en la medida de lo posible», fueron las primeras declaraciones de Piotr Müller, portavoz del Gobierno de Polonia.
Mientras tanto, la incertidumbre es la protagonista. Bélgica, Letonia, Lituania y Estonia ya emitieron pronunciamientos de solidaridad y aunque tampoco confirman una presunta autoría de Moscú, el primer ministro de Bélgica, Alexander De Croo; dejó en claro que tanto los países bálticos como Polonia son parte de la OTAN, «más unida que nunca y equipada para protegernos a todos».
Mientras tanto, el medio polaco Radio Zet replica fotografías del ataque difundidas en Twitter.
Si Putin ataca a un miembro de la OTAN
Desde Estados Unidos, el Pentágono tampoco emite pronunciamientos certeros sobre el presunto ataque ruso contra Polonia. El portavoz del Departamento de Defensa de EE.UU., general de brigada Pat Ryder, descartó que exista algún dato «que corrobore que ha habido un bombardeo con misiles» y que lo están investigando. Aún así, no desestimó lo que pasaría si se demuestra que el gobierno ruso de Vladímir Putin atacó a un miembro de la Alianza Atlántica. «Hemos dejado más que claro que defenderemos cada centímetro del territorio de la OTAN», aseveró.
Su mensaje es concreto y se basa en el artículo 5 de la organización internacional nacida en 1949 para contrarrestar a lo que fue en su momento la Unión Soviética. Este establece que un ataque contra uno de sus miembros, representa un ataque a las 30 naciones de la alianza. Por ende, no es poca cosa lo que podría ocurrir en las próximas horas si la OTAN decide responder a Rusia. A eso hay que sumarle que EE. UU. posee armas nucleares que ha compartido con otros integrantes del grupo.
Sin embargo, antes de cualquier decisión, los Estados miembros deberán ser llamados a consulta, tal como establece el artículo 4, para determinar la amenaza que se cierne sobre alguno de ellos.
Rusia se pronunció
Rusia asevera que no atacó la localidad polaca de Przewodów. Dice que se trata de una «provocación deliberada» y que las informaciones de medios de ese país «no tienen nada que ver con las armas rusas».
Pero algo sí es cierto, este martes el gobierno de Putin ejecutó lo que la agencia EFE califica como «su mayor ataque contra la infraestructura energética ucraniana» desde que comenzó la guerra. Usó más de 90 misiles para dañar alrededor de 15 objetivos. Como consecuencia, más de siete millones de ucranianos ahora carecen de electricidad, informó la Oficina de la Presidencia.