«La cuarentena de los bolivianos en (los puertos chilenos) Iquique y Antofagasta es un gesto de amistad entre Bolivia y Chile y acerca a ambos pueblos», dijo la canciller boliviana Karen Longaric en su cuenta de Twitter, tras la divulgación del acuerdo.
Un comunicado de la cancillería boliviana dijo que en las últimas tres semanas Longaric y su par chileno Teodoro Ribera «han trabajado sostenidamente para lograr un ingreso seguro, gradual y ordenado de los bolivianos que se encuentran en Chile».Agregó que la colaboración incluía la habilitación de «albergues, asistencia médica y ayuda humanitaria para 1.600 bolivianos que se encuentran varados en los territorios de Iquique y Antofagasta» y que la alimentación en los centros de cuarentena sería provista por la Organización Internacional para las Migraciones.
Informes previos de medios locales dijeron que el grupo de bolivianos que fueron llevados de vuelta de la frontera a Iquique era de al menos 800 personas, incluidos decenas de ancianos, mujeres embarazadas y niños.
A ellos se sumaba una cantidad parecida de bolivianos que estaban concentrados en Antofagasta.
La Cancillería dijo que estos migrantes más unos 400 que completaron el fin de semana una cuarentena en el lado boliviano de la frontera con Chile sumaban «2.035 compatriotas que retornarán a territorio nacional».Esta cifra no incluía a otros 350 que ingresaron también desde Chile a fines de marzo.
Medios locales informaron que los millares de bolivianos que tratan de regresar desde Chile son generalmente trabajadores eventuales de la agricultura, construcción y servicios domésticos que perdieron sus empleos por las restricciones emergentes de la pandemia de COVID-19, enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
El Gobierno boliviano fue blanco de críticas de la Defensoría del Pueblo y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por cerrar las fronteras terrestres a sus connacionales durante la cuarentena por la pandemia.
Según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), revelados el lunes, en el mundo existen 2.319.066 casos confirmados de contagio y 157.970 muertos por el COVID-19, enfermedad respiratoria que deriva en pulmonía y cuyo foco comenzó en diciembre pasado en la ciudad china de Wuhan.
Fuente: SputNikNews