Con el chavismo arremetiendo contra los opositores para evitar la celebración de elecciones libres, la candidata presidencial María Corina Machado dio inicio a su campaña exigiendo al régimen fijar la fecha de los comicios y detener las persecuciones y amenazas, como quedó demostrado este lunes con el anuncio de la captura de 31 personas y la emisión de órdenes de aprehensión contra otras por supuestas conspiraciones para asesinar al dictador Nicolás Maduro.
Previo al acto de Machado, donde además lanzó la Gran Alianza Nacional —como nueva coalición de organizaciones en respaldo de su postulación— la candidata antichavista mostró en redes sociales la fachada de una sede de campaña vandalizada con la frase “furia bolivariana”. Como esa, varias instalaciones en todo el país también amanecieron este 23 de enero con las mismas señales de violencia. “Nicolás Maduro ha optado por convertirse en un candidato represor, como sabe que no tiene votos entonces busca esconderse detrás de amenazas, fusiles o de sentencias porque sabe que va a perder”, expresó Machado.
La exigencia al antichavismo continuó en la concentración convocada en Caracas, donde los asistentes coreaban una y otra vez la necesidad de establecer una fecha para las elecciones presidenciales con garantías, así como el levantamiento de la inconstitucional inhabilitación de Machado. Son factores que la dictadura, en conjunto con el Consejo Nacional Electoral y el Tribunal Supremo de Justicia, ha estado retrasando mientras denuncia supuestas conspiraciones para conseguir nuevos presos políticos útiles como fichas de canje. Aún así, Machado no perdió el foco de su mensaje.
La dictadura encarcela a otros dos opositores
Son momentos tensos para la política venezolana. El chavismo sigue sin fijar la fecha de las elecciones presidenciales —las cuales deberían celebrarse en el segundo semestre del año— como se acordó en Barbados. Mientras tanto, desde Miraflores se recicla el viejo libreto del magnicidio que este 23 de enero también llevó tras las rejas a Juan José Freites, coordinador de campaña de Vente Venezuela en el estado Vargas. Fue detenido junto a otra persona por presuntos agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), de acuerdo con los reportes iniciales.
Luis Camacaro, director del comando de campaña en Yaracuy del partido de María Corina, también fue secuestrado en la ciudad de San Felipe, informó el abogado Perkins Rocha. En el marco de esta nueva oleada de detenciones, la candidata antichavista dejó claro durante su mitin que “quiera o no quiera, el pueblo venezolano obligará a Maduro a medirse”.
“Nadie nos saca de esta ruta electoral, en la cual vamos a avanzar y en la que vamos a desalojar a esta tiranía”, aclaró la candidata presidencial de la coalición opositora. En paralelo, desde las filas del régimen organizaron una concentración con muy poca asistencia a pocos metros, respondiendo a la convocatoria de Diosdado Cabello de desatar la “furia bolivariana”. La misma que provocó la vandalización de las sedes de Vente Venezuela.
Comunidad internacional con los ojos sobre Maduro
Sobre Maduro pesan ahora nuevos señalamientos desde la comunidad internacional. El senador republicano Marco Rubio reiteró por qué la tiranía venezolana carece de las intenciones de permitir la celebración de elecciones presidenciales. “¿Cómo es posible negociar un camino hacia elecciones justas y democráticas con un narcorégimen ilegítimo que no deja de usar sus mismas tácticas injustas y represivas?”, escribió en X.
Su mensaje coincide con el del eurodiputado Gabriel Mato Adrover, quien además rechazó las órdenes de aprehensión contra la periodista venezolana Sebastiana Barráez y la defensora de derechos humanos, Tamara Suju. Así, el chavismo allana el camino para la ruta electoral, repleta de órdenes de captura, supuestos magnicidios y persecuciones, mientras que en la acera del frente se le exige fecha de los comicios, respeto por la ley electoral y el levantamiento de la inconstitucional inhabilitación de María Corina Machado.